Eugenio Sánchez Suárez
Con el pretexto de las “tensiones acumuladas” en el paso fronterizo ilegal de GUERGUE- RAT, Marruecos ha desplegado sus fuerzas armadas en una zona del Sáhara Occidental des- militarizada y ha atacado a civiles saharauis desarmados que, desde el pasado 21 de octubre, llevaban a cabo pacíficamente una protesta contra la ocupación ilegal marroquí de su territorio y la incapacidad de la ONU en celebrar la consulta de autodeterminación que fue encomendada en 1991 a la MINURSO (Misión de la ONU para el referéndum del Sáhara Occidental): Vientos de guerra en el Sahara Occidental, ¡¡Inadmisible¡¡
El anuncio hecho por el Frente Polisario de que no va a permanecer indiferente a esta flagrante violación del alto el fuego establecido por la ONU no puede ser utilizado por el Gobierno español para seguir escondiendo la verdad: España es la principal responsable de la no solución de este conflicto por el flagrante incumplimiento de sus responsabilidades ante la comunidad internacional como Potencia Administradora del Territorio No Autónomo del Sahara Occidental (Art.73 Cap. XI de Naciones Unidas).
Vientos de guerra en el Sahara Occidental ¡¡Por fin, llega la oportunidad, para algunos, de esconder detrás de las bombas, columnas de humo, la metralla y los gritos de dolor, las responsabilidades no asumidas, durante los últimos 45 años, no solo por los gobiernos democráticos de ESPAÑA, sino también, por todos los grupos políticos que no han escatimado esfuerzos a la hora de criticar los cuarenta años del franquismo,… pero nunca han sido capaces de denunciar, el último acuerdo, firmado por el gobierno de Arias Navarro: los mal llamados “Acuerdos de Madrid”, origen del drama humanitario Saharaui del 12 de noviembre de 1975.
Vientos de guerra para esconder la ignominia que comenzó extraoficialmente el 17 de junio de 1970, con la detención del líder pacifico saharaui, Mohamed Sidi Brahim Bassiri, encarcelado, torturado y asesinado bajo las órdenes directas de Madrid, acto innoble que impidió una transición pacífica hacia la independencia, de la mano de España, transformándola en el germen que posibilitó la creación del Frente Polisario, tres años más tarde. Ignominia que culminó en noviembre de 1975 con la firma de los ilegales “Acuerdos de Madrid” y la complicidad española con la invasión del Territorio No Autónomo del Sahara Occidental que se remató, tras la proclamación de Juan Carlos de Borbón como rey de España, con el sádico e irresponsable abandono UNILATERAL del territorio, un acto que sitúa a España en contra del derecho internacional y las resoluciones de la ONU.
Durante los 45 años que han transcurrido desde entonces, dirigentes y grupos políticos españoles que dicen respetar la legalidad internacional, la Carta de la ONU y la Declaración Universal de Derechos Humanos, vienen actuando en el sentido contrario. Utilizando la “Dictadura de la Democracia”, han impedido la condena y denuncia de los “Acuerdos de Madrid” que han servido de coartada para seguir incumpliendo el deber de defender los intereses del pueblo saharaui frente a sus agresores. Estos vientos de guerra que ahora soplan sobre el Sáhara son el resultado de esta inacción que ha favorecido la impunidad de los crímenes, torturas y desapariciones con las que Marruecos ha intentado silenciar la lucha saharaui.
Vientos de Guerra que, desgraciadamente, van a servir para seguir escondiendo la responsabilidad del estado español en el inicio del genocidio del pueblo saharaui, cuando permitió los bombardeos de Guelta Zemmur, Um Draiga y Tifariti, desde principio de enero de 1976, hasta el 22 de febrero de ese mismo año, ¡¡estando España presente en el territorio¡¡, abandonándolo unilateralmente cuatro días más tarde, dejando a merced de las tropas invasoras a todo un indefenso pueblo, al que tenía “el sagrado deber de defender,…preservar sus recursos naturales,…y encauzarle en la vía política”, como Potencia Administradora de dicho Territorio no Autónomo, que era,…..y sigue siendo.
Miles de víctimas, y sus familiares, merecen un mínimo respeto y consideración, después de tanta muerte y destrucción. Exigimos evitar el inicio de otra guerra. Hay que ser muy conscientes que el drama por la pérdida de seres queridos, de esa injusta guerra (1975/1991), llevó el dolor y sufrimiento a familias saharauis, marroquíes, mauritanas y españolas. Y que las familias no entienden de política, cuando el dolor por la pérdida del ser querido invade sus hogares.
¿Acción jurídica o guerra?
Las responsabilidades de estado, ni caducan, ni prescriben. Desde 1975, con la permisividad del Gobierno de Arias Navarro, España, (la Potencia Administradora del Territorio No Autónomo del Sahara Occidental), permitió y sigue siendo cómplice de esa ilegal e injusta fase inicial, y las dramáticas consecuencias de dicho comportamiento. Posteriormente, los diferentes gobiernos democráticos han continuado consintiendo los ametrallamientos, torturas, asesinatos, desapariciones, y usurpación de recursos, sin el menor remordimiento, esperando el agotamiento y derrota de la población saharaui, para borrar así la ignominia de sus responsabilidades políticas, acumuladas durante estos 45 años.
En estos momentos, donde el dolor y desesperación, por tantos años de injusticia, impotencia, torturas, encarcelamientos, asesinatos, usurpación de recursos, puede ser el detonante de una cruenta guerra. Se exige al Gobierno de ESPAÑA (La Potencia Administradora del Territorio No Autónomo del Sahara Occidental), la toma de acciones inmediatas, que eviten el inicio de un conflicto bélico, con la consecuente pérdida de cientos o miles de seres humanos. Ante el armamento bélico, tenemos el “armamento jurídico”, donde se demuestra la ilegalidad de los “Acuerdos de Madrid.”. Es tiempo de reconocer los errores, asumirlos y actuar en consecuencia. Ya no queda tiempo de que España, como siempre, siga guardando cómplice silencio, con la continuada y conocida ausencia de valentía, en asumir las responsabilidades correspondientes.
Por mucho que traten de negarlo, ni el PSOE ni el PP, ni los ex presidentes Sres., Zapatero, Rajoy, y el actual Pedro Sánchez han sido capaces de demostrar la legalidad de los “Acuerdos de Madrid”, y de que ESPAÑA, ya no sea la Potencia Administradora del Territorio No Autónomo del Sahara Occidental, según art.73 Cap. XI de la Carta de Naciones Unidas. Ni estos dirigentes ni sus respectivos grupos políticos han podido rebatir los fundamentados argumentos ( ver www.apdhe.org/actua/ ) enviados directamente por la Asociación Pro Derechos Humanos de España, a través del registro de entrada del Congreso de los Diputados).
Como dijo un anciano saharaui “quien sigue mandando en el Congreso de los Diputados sobre los “Acuerdos de Madrid”, es el espíritu de Arias Navarro.
Por todo lo anterior: “Saharaui, no caigas en la trampa,… antes de tocar el fusil, Toca la puerta de Madrid”
Grupo del Sahara / APDHE
Eugenio Sánchez Suárez
Responsable Campaña/Denuncia Internacional “Acuerdos de Madrid”
Nota.- La Campaña/Denuncia Internacional de los “Acuerdos de Madrid”, continuará hasta que ESPAÑA asuma sus responsabilidades como Potencia Administradora del Terrotorio No Autónomo del Sahara Occidental, según art.73 Cap XI de la Carta de Naciones Unidas.
Origen: Vientos de Guerra en el Sáhara Occidental – apdhe