Si bien es cierto la displicencia consensuada desde las instituciones gubernamentales españolas respecto al asunto y conflicto del Sáhara Occidental, el apoyo por parte de un grueso de la población no es menester. Durante las últimas semanas, de forma recurrente, se han podido ver las multitudinarias manifestaciones llevadas a cabo a todo lo largo y ancho del país peninsular, desde la capital hasta la periferia. Esto, sin ningún remilgo, una vez más, si el régimen político en el que vivimos tiene algo que ver con lo democrático, el ‘demos’, pueblo. Sin embargo, este tema, que no es menester, no es el que nos incumbe en esta entrevista.

El grueso mayúsculo de este soporte y sostén de la resistencia pacífica saharaui en Cataluña, donde al igual que en otras regiones de España se lleva a cabo un importante trabajo de divulgación, cooperación y apoyo, se encuentra reunido en la Federación ACAPS (Associació Catalana d’Amics del Poble Saharaui). De este modo y con la voluntad de querer conocer y describir una realidad latente, en plena efervescencia, hemos hablado con Núria Salamé, la Presidenta de dicha asociación.

  • Después del desalojo de los civiles saharauis se ha dado la ruptura del alto el fuego por parte de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), pero ¿cuál es la situación actual?

Es muy complejo, en cuanto que las noticias nos vienen dadas con escasas explicaciones. No obstante, sabemos que el Frente Polisario sigue manteniendo su estrategia, de mantenerse frente al muro, donde se nos indica que hay ataques y bombardeos en el sector de Hausa. (…)