Su rostro no le es ajeno a casi ningún saharaui, su etapa como presentador del telediario nacional le han consolidado como una referencia entre sus connacionales. Pero mucho antes de eso, las facciones de su cara la hacían inconfundible para miles de personas dentro y fuera del país. Jalil comparte un evidente parecido con su padre, Mohamed Abdelaziz, histórico líder del Frente Polisario durante cerca de 40 años.

Su padre representa a la generación que lideró la lucha contra el colonialismo español y combatió durante 16 años al ocupante marroquí. Jalil es parte de esa nueva generación de saharauis criados en la violenta paz que ha estrangulado a su pueblo durante 30 años de espera, tres décadas esperando un referéndum que nunca ha llegado. Ahora, él y el resto de la juventud saharaui han dado un paso al frente y se disponen a escribir una nueva página en la historia de su país fusil en mano.

El móvil no deja de sonar, entre llamada y llamada comentamos las noticias que llegan desde el frente, él no puede ocultar su emoción, “ya era hora” dice. “Todo el pueblo saharaui apoya la vuelta a la guerra” afirma.

Jalil reside ahora en España desde donde lucha contra el bloqueo mediático que vive el Sáhara. Nacido en los campamentos de refugiados de Tinduf, se crió con sus dos familias, la natal y la adoptiva. Fue miembro de la iniciativa Vacaciones en Paz y pasó varios años con una familia de acogida gaditana con la que mantiene mucho contacto, “son mis otros padres”. Tras esto, pasó el servicio militar en el Sáhara y cursó estudios de Comunicación en Cuba, gracias a los amplios convenios de cooperación entre la isla caribeña y la República saharaui. A su vuelta comenzó a trabajar en la televisión nacional, aunque mantendría contacto y colaboración con otros medios internacionales. Fue hace tres años, cuando se instaló en España, desde donde continua con su lucha por la libertad del Sáhara. No obstante, confiesa que está deseando volver al Sáhara y ayudar sobre el terreno ahora que los tambores de guerra vuelven a resonar en la hammada.

La juventud saharaui, prácticamente todas las personas de 40 años o menos, se han criado o en el exilio, o en territorios ocupados, o campos de refugiados en Tinduf. ¿Qué piensa un joven saharaui después de tantos años de espera?
 
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