El Ministro de Agricultura español anuncia que recurrirá la anulación de los acuerdos UE-Marruecos que arruinaron al sector agrícola español debido a la competencia desleal ejercida por Marruecos rebasando las cifras de exportación.
H. Mohamed.
ECS. Madrid. | El ministro español de Agricultura, Luis Planas, ha anunciado el pasado miércoles que España recurrirá la sentencia del TUE que anula los acuerdos comerciales UE-Marruecos que incluyen el Sáhara occidental. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, lo dejó claro con más claridad el pasado domingo al afirmar que «España va a recurrir las sentencias del Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) que invalidan los acuerdos de asociación y pesca entre la UE y Marruecos, según recoge El Confidencial en un extenso artículo del especialista en el Magreb Ignacio Cembrero. Unas declaraciones que también fueron confirmadas de nuevo este martes por el Ministro de Agricultura, Luis Planas, ignorando que en virtud del acuerdo cancelado, Marruecos rebasaba las cifras de comercio permitidas y hundía el mercado europeo dañando severamente al sector hortofrutícola español, que lleva meses solicitando la intervención de su gobierno para proteger sus intereses y beneficios.
No obstante, el Ministro de Agricultura se encuentra ante un conflicto de intereses y de lealtades, no sabe si debe representar y proteger los intereses de los agricultores y ciudadanos españoles o su documentada lealtad e inclinación a favor de Marruecos, como ya filtró Wikileaks cuando éste ejercía de embajador en Rabat donde intentó ayudar al régimen marroquí a presentar su pseudo Plan de Autonomía. Incluso desde un punto de vista económico, las pérdidas son mucho más cuantiosas por el exceso de tomate saharaui etiquetado como marroquí en el mercado español que las posibles pérdidas derivadas de la pesca. Una posición española que tendrá poco recorrido judicial y que solo se puede entender en el marco de complacer a Marruecos dadas las tensiones reinantes.