En una carta conjunta con la Asociación de Amigos de la República Saharaui en Francia, las dos ONGs expresaron su esperanza de que la visita del Presidente francés a Marruecos sea útil en otros aspectos, en particular sobre la liberación de los presos políticos del Grupo de Gdeim Izik y de todos los presos civiles saharauis encarcelados por la libertad de expresión.
La carta también enfatizaba que el interés que pondrá el Presidente francés a la situación de los civiles saharauis en los territorios ocupados y de los prisioneros saharauis en las cárceles marroquíes sería un primer paso hacia el retorno a las resoluciones de la ONU que cada año enfatizan la urgente necesidad de implementar la autodeterminación.
«Es inconcebible ceder a las presiones marroquíes, a costa de negar el respeto de los derechos humanos del pueblo saharaui y de la legalidad internacional, en particular la descolonización del Sáhara Occidental, última colonia del continente africano», destacan las dos ONGs en la carta.
Al recordar la invasión y ocupación ilegal del Sáhara Occidental, la memoria del pueblo saharaui no olvida que Francia incitó la guerra de invasión al territorio al proporcionar medios mediáticos y políticos y militares en flagrante violación del derecho internacional.
Hay recordar asimismo que Francia ofreció asesoramiento e intervino con Marruecos en la guerra contra el pueblo saharaui. Fue el mecenas de Marruecos desde su asiento en el Consejo de Seguridad de la ONU como miembro permanente y continúa apoyándolo en su ocupación y obstaculizando los esfuerzos de la comunidad internacional para una solución al contencioso. Fue Francia quien adoptó una posición hostil vetando todas las resoluciones que no bonificaban a Marruecos y en contra del referéndum y la autodeterminación del pueblo saharaui.