Madrid (España), 30 de octubre de 2024 (SPS)- En una decisión ampliamente condenada, el presidente francés Emmanuel Macron anunció este martes su apoyo explicito al expansionismo de Marruecos sobre el Sáhara Occidental, un territorio ocupado militarmente desde 1975. En un contexto en que la Unión Europea enfatiza la necesidad de respetar la Carta de las Naciones Unidas y apoyar los derechos de los pueblos a la autodeterminación, la postura de Macron fue señalada como un acto irresponsable que, lejos de promover la paz, fomenta la injusticia y la ley del más fuerte en el escenario internacional.

Abdulah Arabi, representante del Frente Polisario en España, señaló en una columna publicada en El Independiente que las declaraciones de Macron no solo “son hostiles a los derechos del pueblo saharaui”, sino que también contradicen el derecho internacional y los principios de los derechos humanos.

La hostilidad de Macron con el pueblo saharaui

Arabi subraya que Macron promueve una política «contraria a la legalidad internacional» al respaldar la ocupación marroquí, la cual, de acuerdo con el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), no tiene soberanía sobre el territorio del Sáhara Occidental. En 2016, el TJUE determinó que cualquier acuerdo económico entre la Unión Europea y Marruecos que incluya recursos del Sáhara Occidental es ilegal sin el consentimiento expreso del pueblo saharaui. Sin embargo, Macron continúa ignorando este fallo, promoviendo acuerdos económicos y apoyo diplomático en favor de Marruecos.

Arabi destaca que la postura francesa se aleja de la neutralidad esperada de un miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU y se ha convertido en un obstáculo para la autodeterminación del Sáhara Occidental, un derecho reconocido por la ONU y la Unión Africana. «Macron ha propuesto en su discurso la vulneración del Derecho Internacional y de la jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea», afirma Arabi en El Independiente, subrayando que esta política de respaldo al régimen marroquí ha perdurado desde el inicio de la ocupación en 1975.

“Lo expresado por Macron estos últimos meses no es más que la constatación de una política de apoyo y cooperación que se lleva a cabo desde el inicio de la ocupación en distintos ámbitos clave como el militar, económico y político en el ámbito internacional”.

La postura de Francia, añade Arabi, es una continuación de décadas de apoyo militar, económico y político a Marruecos, lo cual impide que el pueblo saharaui pueda decidir libremente su futuro mediante un referéndum de autodeterminación.

Dirigido a Macron, Arabi concluye «que la soberanía del Sahara Occidental, corresponde al pueblo saharaui, y es a él a quien corresponde, mediante un referéndum que permita su ejercicio efectivo a la autodeterminación e independencia, a quien corresponde decidir libremente su futuro. Ese es el único ‘marco’ posible».