Madrid (Madrid), 21 noviembre del 2024 (SPS)-Varios sectores de la militancia del PSOE llega al 41º Congreso Federal con un mensaje claro: corregir la posición adoptada por el Gobierno de Pedro Sánchez sobre el Sáhara Occidental y alinearse con la legalidad internacional. Este desafío directo a la dirección de Ferraz, liderada por Pedro Sánchez, marca un punto importante de esta cita en la que “toca redefinir la línea política” del partido.
Diversas federaciones socialistas han presentado enmiendas que instan a rectificar lo que califican como un «giro histórico» en la política exterior española hacia el Sáhara Occidental y el proceso de descolonización liderado por la ONU y la UA. Estas propuestas buscan que el PSOE retome un papel activo en el proceso de descolonización y se posicione inequívocamente a favor del derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui, en cumplimiento de las resoluciones internacionales.
Con la intención de esconder el problema bajo la alfombra, la dirección de Ferraz omitió cualquier referencia al Sáhara Occidental en la ponencia marco para el Congreso. Sin embargo, las bases han aprovechado los debates sobre política internacional para reclamar una revisión drástica de la postura del Gobierno. En particular, las Juventudes Socialistas y la federación de Madrid abogan por el reconocimiento formal de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) y el ejercicio de una presión diplomática efectiva sobre Marruecos.
«La Dictadura Marroquí» y Derechos Humanos
Algunas federaciones, como la de Cantabria, han calificado de forma nitida a Marruecos como una «dictadura» y denuncian las violaciones sistemáticas de derechos humanos en el Sáhara ocupado. Estas propuestas instan al Gobierno español a exigir la liberación de presos políticos saharauis y a denunciar los abusos cometidos por Rabat ante la comunidad internacional.
La divergencia interna sobre la cuestión saharaui pone a Sánchez en una posición incómoda y evidencia los diferentes rumbos entre el sector pro marroquí y los sectores que siguen aferrados a los principios de base de la organización. Mientras la elite de Ferraz intenta mantener una relación estrecha con Marruecos, aunque suponga una contradicción alarmante, sectores del partido exigen una ruptura con esta política, que consideran contraria a los principios históricos del PSOE y a la legalidad internacional.
«España tiene una responsabilidad histórica y moral como potencia administradora del Sáhara Occidental», reza una de las enmiendas más respaldadas, reflejando el sentir de amplias capas de la militancia. Este llamado cobra especial fuerza en un momento en el que el Gobierno sigue defendiendo el ilegal plan de autonomía marroquí para resolver el conflicto, dando la espalda al inalienable derecho del pueblo saharaui.
Según recoge el medio El Independiente, otras federaciones, como la aragonesa, aprovechan para recordar la importante victoria del pueblo saharaui ante los tribunales del TJUE. “Ahora es un momento idóneo para la reflexión de la causa saharaui, especialmente tras las tres sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea de 4 de octubre de 2024, contra el expolio de sus recursos, en las que el Tribunal reitera nuevamente la distinción entre Marruecos y el Sahara Occidental, dictaminando la anulación de los acuerdos entre la Unión Europea y Marruecos al considerar vulnerado el efecto relativo de los tratados y el derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui”, señala el texto aragonés.
El 41º Congreso Federal, que tendrá lugar la próxima semana, del 29 de noviembre al 1 de diciembre en el Palacio de Congresos y Exposiciones Sevilla, FIBES, se perfila como un desafío interno para la dirección de Pedro Sánchez, quien deberá responder a la creciente presión de las bases y de sectores críticos del partido para realinear la política exterior española con sus principios históricos.