“Desmontando bulos contra el pueblo saharaui y el Frente Polisario” – 5

El Frente Polisario no es terrorismo: desmontando el bulo más peligroso contra el pueblo saharaui
En los últimos años, Marruecos y algunos de sus aliados han intensificado una campaña sistemática para presentar al Frente Polisario —movimiento nacional de liberación del pueblo saharaui— como una organización vinculada al terrorismo. No es una acusación inocente: es una maniobra calculada para criminalizar la resistencia, manchar la legitimidad internacional de la causa saharaui y justificar, ante la opinión pública, una ocupación que el derecho internacional no reconoce. Este bulo, repetido una y otra vez en declaraciones oficiales, medios afines y estudios de think tanks alineados con Rabat, se derrumba ante los hechos, las resoluciones de la ONU y la verificación independiente de organismos de derechos humanos.
«No existe ni una sola resolución de la ONU que vincule al Frente Polisario con el terrorismo»
Desde 1979, la Asamblea General de las Naciones Unidas reconoce al Frente Polisario como el “representante legítimo del pueblo del Sáhara Occidental” (resolución A/RES/34/37). Este estatus ha sido confirmado en resoluciones posteriores y nunca ha sido cuestionado por la ONU, el Consejo de Seguridad ni ningún organismo internacional de prestigio. Muy al contrario, el Polisario ha sido parte oficial de todas las rondas de negociación auspiciadas por la ONU, y sus dirigentes son interlocutores reconocidos por gobiernos, bloques regionales y el propio Secretario General. Si hubiera algún vínculo con el terrorismo, esta legitimidad diplomática no existiría.
En el plano militar, el Ejército Popular de Liberación Saharaui (ELPS), brazo armado del Polisario, ha combatido siempre en un marco de conflicto de liberación nacional, limitado a objetivos militares marroquíes y respetando las normas del Derecho Internacional Humanitario. Ningún informe de la ONU, el Comité Internacional de la Cruz Roja, Human Rights Watch o Amnistía Internacional lo acusa de crímenes de guerra, ataques contra civiles o uso de armas prohibidas.
«El Polisario ha destruido voluntariamente más de 20.000 minas antipersonales y eliminado 50.000 artefactos explosivos»
Además, ha suscrito compromisos como la Convención de Ottawa, el rechazo al reclutamiento de menores y la protección de mujeres y civiles en zonas de guerra. Este nivel de adhesión a las normas humanitarias es excepcional para un movimiento de liberación en un conflicto tan prolongado.
La historia también desmiente las acusaciones. Durante los años de guerra más intensa (1975–1991), el Polisario capturó a más de 4.000 prisioneros marroquíes. El CICR supervisó sus condiciones y su liberación progresiva. En 1985, el Polisario intentó liberar 200 prisioneros como gesto de buena voluntad, pero Marruecos rechazó recibirlos hasta que intervino el CICR. En 2005 fueron liberados los últimos prisioneros, sin denuncias de torturas o violaciones sistemáticas. No se documentó ninguna campaña de violencia contra civiles y los pocos incidentes mencionados por Rabat carecen de pruebas sólidas o responden a operaciones de falsa bandera.
«Nunca hubo una campaña sistemática del Polisario contra la población civil»
Entre 1991 y 2020, el Polisario mantuvo un alto el fuego estricto, a pesar de las provocaciones marroquíes: represión, colonización, expansión del muro militar. Fue Marruecos quien violó el acuerdo en Guerguerat en noviembre de 2020. La reanudación de las hostilidades se produce en respuesta a esa violación flagrante y en un marco de derecho humanitario, no de derecho penal antiterrorista. Ninguna lista oficial de grupos terroristas —ni de la ONU, ni de Estados Unidos, ni de la Unión Europea— ha incluido nunca al Polisario.
Mientras tanto, en los campamentos de refugiados saharauis en Tinduf (Argelia) no hay “escuelas de terrorismo”, sino escuelas reales, hospitales, estructuras democráticas y programas de empoderamiento. Durante décadas, delegaciones del Parlamento Europeo, la ONU y ONG han visitado los campamentos sin encontrar indicios de adoctrinamiento violento.
«El verdadero terror lo ejerce Marruecos en el Sáhara ocupado: torturas, desapariciones, represión y un muro minado de 2.700 km»
Lo que sí está documentado, por Amnistía Internacional, Human Rights Watch y la ONU, es el terror de Estado practicado por Marruecos: torturas sistemáticas, desapariciones forzadas, represión de manifestaciones pacíficas, ataques con drones a civiles y un muro militar plagado de minas.
Criminalizar al Frente Polisario es, en el fondo, criminalizar al pueblo saharaui entero. Es intentar borrar su causa legítima, bloquear la solidaridad internacional y justificar la represión. No hay informes, sentencias ni pruebas que sostengan la acusación. El Polisario ha demostrado compromiso con la paz y respeto a las normas internacionales, mientras que Marruecos acumula violaciones flagrantes del derecho internacional.
«El Frente Polisario no es terrorismo: es la voz y la fuerza legítima de un pueblo que resiste una ocupación ilegal»
En NO TE OLVIDES DEL SÁHARA OCCIDENTAL lo afirmamos con claridad: el Frente Polisario no es terrorismo. Es la voz y la fuerza legítima de un pueblo que, desde hace más de medio siglo, resiste una ocupación ilegal. Desmontar este bulo no es solo una tarea informativa: es un acto de justicia y memoria.
Conclusión
El intento de vincular al Frente Polisario con el terrorismo no se sostiene ni jurídica ni políticamente. No existen informes, pruebas ni condenas que avalen esta acusación. El ELPS ha actuado dentro de las normas del Derecho Internacional Humanitario, ha demostrado su compromiso con la paz y no ha cometido crímenes de guerra ni actos terroristas reconocidos por instancia alguna.
Frente a esta campaña de criminalización, lo que hay es una voluntad de Marruecos de anular al interlocutor saharaui, ocultar sus propias violaciones y perpetuar la ocupación. Pero los hechos, el derecho internacional y el sentido común están del lado de la verdad.
NO TE OLVIDES DEL SAHARA OCCIDENTAL reivindica con firmeza la legitimidad del Frente Polisario como movimiento de liberación y rechaza toda narrativa que intente desacreditar su lucha. Quienes hoy lo acusan sin pruebas, mañana intentarán borrar a un pueblo entero.
PLATAFORMA «NO TE OLVIDES DEL SAHARA OCCIDENTAL»
