El Frente POLISARIO no acepta la “autonomía marroquí”: no participará en procesos que nieguen la autodeterminación

El Frente POLISARIO no acepta la “autonomía marroquí”: no participará en procesos que nieguen la autodeterminación

La ofensiva diplomática desatada en el Consejo de Seguridad en torno al proyecto de resolución presentado por Estados Unidos ha intentado alimentar un viejo bulo: que el Frente POLISARIO habría aceptado discutir el plan de autonomía marroquí como punto de partida para las negociaciones. Nada más lejos de la verdad. En una carta oficial dirigida al presidente del Consejo, el embajador saharaui ante la ONU, Dr. Sidi Mohamed Omar, ha dejado claro que ningún proceso político puede basarse en marcos preestablecidos ni en resultados impuestos de antemano, y que cualquier intento de “redefinir” el derecho saharaui a la autodeterminación es, simplemente, inaceptable.



En vísperas de las consultas del Consejo de Seguridad sobre la renovación del mandato de la MINURSO, el representante del Frente POLISARIO ante las Naciones Unidas y coordinador con la misión, Sidi Mohamed Omar, dirigió una carta oficial al presidente del Consejo, Vassili Nebenzia, embajador de la Federación de Rusia.
La misiva, enviada desde Nueva York el 23 de octubre, refleja la profunda preocupación del pueblo saharaui ante el proyecto de resolución presentado por Estados Unidos, país responsable del borrador sobre el Sáhara Occidental en el Consejo de Seguridad.

Según el diplomático saharaui, dicho texto constituye “una desviación grave y sin precedentes”, no solo de los principios del derecho internacional, sino también del propio marco que regula el proceso de paz de Naciones Unidas. El documento norteamericano, advierte Omar, pretende imponer un marco de negociación preestablecido que condiciona o limita el ejercicio del derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación, vulnerando las resoluciones de la ONU y los dictámenes de la Corte Internacional de Justicia.

En su carta, el representante saharaui recuerda que el Consejo de Seguridad ha establecido de forma constante y consensuada que la única vía legítima hacia la paz pasa por negociaciones directas entre el Frente POLISARIO y Marruecos, bajo los auspicios del Secretario General, sin condiciones previas y de buena fe, con el objetivo de alcanzar una solución política justa, duradera y mutuamente aceptable que garantice el derecho del pueblo saharaui a decidir libre y democráticamente su futuro. Cualquier texto que fije de antemano el resultado —como el llamado “plan de autonomía” presentado por Marruecos en 2007— destruye la base jurídica de la MINURSO y equivale a legitimar una ocupación colonial contraria al derecho internacional.

Frente a ese intento, el Frente POLISARIO reafirmó su posición de principio. El pasado 20 de octubre presentó al Secretario General una propuesta ampliada, inspirada en la de 2007, que se apoya en el derecho a la autodeterminación y propone un referéndum libre y supervisado por Naciones Unidas. Sin embargo, el movimiento advierte que si el proyecto estadounidense se aprueba sin modificaciones, no participará en ningún proceso político basado en un texto que traicione la esencia del proceso de descolonización del Sáhara Occidental.

La ofensiva diplomática orquestada por Washington y amplificada por algunos medios pretende confundir a la opinión pública, insinuando que el Frente POLISARIO habría aceptado debatir sobre la autonomía.
La carta de Sidi Mohamed Omar desmiente categóricamente ese bulo: no se trata de un cambio de postura, sino de una reafirmación firme de la línea histórica saharaui, comprometida con la paz justa y el respeto del derecho internacional. El POLISARIO no rechaza el diálogo —subraya—, pero no aceptará nunca una paz impuesta ni un marco que niegue el referéndum. La soberanía sobre el territorio pertenece exclusivamente al pueblo saharaui.

Con esta posición, la dirección saharaui lanza un mensaje inequívoco al Consejo de Seguridad: la autodeterminación no se negocia. Ningún texto diplomático, ningún acuerdo bilateral ni “trato” entre potencias puede transformar un proceso de descolonización en un expediente de autonomía. Mientras la ONU siga abordando el conflicto del Sáhara Occidental como una mera disputa regional, seguirá aplazando la justicia y traicionando su propia Carta fundacional.

Plataforma “No te olvides del Sáhara Occidental”