El conflicto de Palestina, la guerra de Ucrania… El panorama internacional vive momentos convulsos que, sin duda, acaparan muchos de los titulares que leemos a diario. Sin embargo, hay ciertas zonas del mundo de las que apenas se habla, como es el caso del Sáhara Occidental, a pesar de arrastrar años de penurias. Este conflicto, uno de los más prolongados del mundo, presenta importantes desafíos en el contexto geopolítico actual, por ello y con el objetivo de explorar enfoques innovadores y multidisciplinares sobre el mismo, la Universidad de Deusto acogió la semana pasada un Congreso Internacional sobre el Sáhara Occidental.

La cita, que promovió a lo largo de dos intensas jornadas un espacio de reflexión crítica y diálogo colaborativo entre docentes, investigadores y estudiantes de las áreas de Derecho, Trabajo Social, Relaciones Internacionales y Empresa, tuvo lugar los días 9 y 10 de mayo en el campus donostiarra.

Expertos y alumnado profundizaron, a través de diversos paneles, en las variadas aristas que presenta el Sáhara, como son las nuevas perspectivas del derecho internacional en el conflicto del Sáhara Occidental, los enfoques multidisciplinares para la resolución de conflictos prolongados, las crisis humanitarias asociadas a estos conflictos, las innovaciones tecnológicas y su influencia en el derecho internacional, el papel de los nuevos actores políticos en el conflicto saharaui, los retos derivados de los recientes cambios políticos en España y Europa, o los derechos humanos en el contexto de la ocupación prolongada, entre otros.

Propuestas concretas

Coordinado por María López Belloso, investigadora de la Universidad de Deusto y doctora en Derechos Humanos, el viernes se celebró un enriquecedor encuentro que reunió en la sala Tokiski del campus a un nutrido grupo de estudiantes de Derecho, Trabajo Social, Relaciones Internacionales y ADE de la Universidad de Deusto. Los alumnos, divididos en tres grupos, presentaron ante profesores y expertos propuestas concretas para abordar los desafíos más significativos en el contexto del conflicto, como los retos de la cooperación al desarrollo y la ayuda humanitaria derivados de la prolongación del conflicto, el expolio de los recursos naturales del territorio, y la defensa de los derechos humanos en los órganos del sistema internacional de protección de los derechos humanos.

“Más allá de la ayuda humanitaria, es necesario establecer nuevas políticas de cooperación enfocadas al largo plazo para que promuevan el desarrollo del pueblo saharaui”

El grupo formado por estudiantes de Trabajo Social y Educación Social fue el encargado de inaugurar la sesión proponiendo una serie de proyectos que sería interesante llevar a cabo desde la vertiente social en los campamentos saharauis. La puesta en marcha de una radio-televisión pública saharaui, la creación de un podcast protagonizado por jóvenes saharauis o lograr la implicación de las administraciones locales vascas fueron algunas de las propuestas planteadas.

“Más allá de la ayuda humanitaria, es necesario establecer nuevas políticas de cooperación enfocadas al largo plazo para que promuevan el desarrollo del pueblo saharaui mediante la educación, la reducción de desigualdades, la perspectiva de género y la paz y la justicia. Ámbitos que, además, están alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible”, subrayaron.

“Uno de los mayores yacimientos de fosfatos del mundo se encuentra en el Sáhara Occidental. Teniendo en cuenta que el de los fertilizantes es un sector clave para Marruecos, constituyendo el 5% de su PIB, esta zona es realmente importante para Marruecos»

El segundo grupo, compuesto por alumnos de ADE y Relaciones Internacionales, abordó el interés que despierta en la comunidad internacional la explotación de los recursos naturales de este territorio, muy atractivo para sectores como la pesca, la agricultura y la energía. “Uno de los mayores yacimientos de fosfatos del mundo se encuentra en el Sáhara Occidental. Teniendo en cuenta que el de los fertilizantes es un sector clave para Marruecos, constituyendo el 5% de su PIB, esta zona es realmente importante para Marruecos. El problema es que su explotación no beneficia al pueblo saharaui, sino al propio Marruecos y a la Unión Europea”, lamentaron, y concluyeron que, a su juicio, “falta voluntad política para la resolución del conflicto”.

El caso de Naama Asfari

Uno de los momentos más emotivos de la jornada llegó en el último bloque, en el que estudiantes de Derecho Internacional y Relaciones Internacionales pusieron sobre la mesa las violaciones de los derechos humanos, centrándose en el caso de Naama Asfari, activista saharaui condenado “injustamente” a 30 años de prisión tras “un polémico juicio basado en unas confesiones realizadas bajo tortura”.

«Es necesaria la presión internacional para hacer visibles las consecuencias de este conflicto. Pero analizando las relaciones internacionales de Marruecos observamos que se trata de relaciones complejas que van cambiando en función de los intereses”

“Este caso pone de relieve que los intereses económicos y políticos priman sobre la defensa de los derechos humanos. Es necesaria la presión internacional para hacer visibles las consecuencias de este conflicto. Pero analizando las relaciones internacionales de Marruecos observamos que se trata de relaciones complejas que van cambiando en función de los intereses”, observaron.

En la sala se encontraba la esposa de este activista, Claude Mangin, quien, mientras seguía con interés el relato de su caso, recibió la llamada del propio Naama desde prisión, que contactó con ella para agradecer el interés mostrado por el grupo de estudiantes.

En la organización de esta iniciativa han colaborado la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas de la Universidad de Deusto, el Observatorio Universitario Internacional para el Sáhara Occidental, el Instituto de Derechos Humanos Pedro Arrupe y el Grupo de Investigación Deusto Valores Sociales.