Fuente: Los niños saharauis del programa ‘Vacaciones en Paz 2025’ llegan este viernes a Asturias – GenteDigital
Los 99 niños saharauis que participan en el programa ‘Vacaciones en Paz 2025’ llegan este viernes a Asturias, donde permanecerán hasta el 3 de septiembre. Su llegada está prevista a las 8.40 horas del viernes al Aeropuerto de Asturias.
‘Vacaciones en Paz’ es un programa solidario de acogida temporal de niños y niñas de 8 a 12 años, provenientes de los campamentos de población refugiada saharaui de Tindouf (Argelia) durante los meses de verano.
En Asturias, la entidad encargada de coordinar el programa es la Asociación Asturiana de Solidaridad con el Pueblo Saharaui, junto con la Delegación Saharaui en Asturias y el Ministerio de Juventud y Deporte de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD).
El programa se desarrolla gracias a la solidaridad de las familias de acogida y al apoyo de diferentes Administraciones Públicas, estas últimas son quienes financian, entre otras cuestiones, los gastos de desplazamiento de los menores desde los campamentos hasta nuestra región.
Por su parte, las familias de acogida se hacen cargo de los cuidados, manutención y alojamiento de los menores durante su estancia en Asturias.
Por último, la Asociación Asturiana de Solidaridad con el Pueblo Saharaui se encarga de prestar apoyo a las familias durante la acogida, orientando y supervisando la misma, facilitando así que todo salga a la perfección y que la experiencia resulte positiva para todas las partes implicadas.
OBJETIVOS DEL PROGRAMA
Este programa persigue contribuir a que los menores se alejen de las altas temperaturas y de los riesgos que esto supone para la vida. «La estancia de los niños y niñas saharauis en Asturias es una oportunidad para evitar su exposición a las duras condiciones climatológicas de los campamentos, donde la temperatura en verano alcanza los 55 grados», han señalado.
Otro de los objetivos es cuidar la salud y que los menores se alimenten bien, con la realización de revisiones médicas rutinarias y controles de salud. Además, acceden a una dieta rica y equilibrada que les permite recuperar los niveles necesarios de nutrientes.
En tercer lugar se trata de que los menores descubran el mundo fuera de los campamentos, a través del conocimiento de otras formas de vida y culturas.