Dos cuentos, “La serpiente y la rana” e “Iyoke”. Una lectura escenificada. La mirada asombrada de los niños y su fascinación por los animales. Todo se sumó en las bibliotecas de Smara y Auserd . Muchas preguntas, muchos deseos de saber cómo viven los animales de la sabana africana. Es lo que tienen los cuentos bien contados, permiten entrar en mundos desconocidos y transitar por ellos , descubriendo la vida de otros seres, en otros espacios. Y, cuando se vuelve a la realidad, la imaginación y la capacidad de recrear lo aprendido generan pequeñas obras de arte, algunas individuales, como la jirafa modelada en plastilina por un pequeño lector de Auserd y otras colectivas, como la serpiente que construyeron los lectores de Smara.
Origen: Bubisher EL MUNDO ANIMAL