- Las asociaciones solidarias con el Sáhara piden al presidente del Gobierno que vuelva a la legalidad internacional y abandone la traición al pueblo saharaui.
- La RASD, una realidad incontestable: forma parte de la Unión Africana, gestiona y legisla sobre los aproximadamente 173.000 saharauis de los campamentos de refugiados y de los territorios liberados en el Sáhara Occidental y ha sido reconocida por 84 Estados.
Alfonso Lafarga.-
La Coordinadora Estatal de Asociaciones Solidarias con el Sáhara (CEAS-Sáhara) califica de “nefasta” la reciente visita del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a Marruecos, donde “rindió pleitesía” al rey Mohamed VI.
En este visita, que coincidió con el 48 aniversario de la proclamación de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), las asociaciones solidarias recalcan que el presidente del Gobierno de España reafirmó su “reconocimiento a la posición marroquí de una autonomía que no puede ser tenida en cuenta sin la consulta al pueblo del Sáhara Occidental y sin una alternativa que incluya la opción de la independencia”.
En un comunicado, CEAS-Sáhara denuncia el cambio de postura del Gobierno de España, potencia administradora del Sáhara Occidental, y le insta a que “recupere el sendero de la legalidad internacional del que nunca debió salir”, que se aparte del camino de la traición y que reconozca el derecho a la autodeterminación e independencia del pueblo saharaui.
Afirma que la RASD es una realidad incontestable que forma parte de la Unión Africana y es un Estado que gestiona y legisla sobre los aproximadamente 173.000 saharauis de los campamentos de refugiados en Tinduf (Argelia) y de los territorios liberados en el Sáhara Occidental.
“Un Estado que ha asumido todas sus responsabilidades en defensa e interior, en enseñanza y sanidad, en alimentación, en medio ambiente, en políticas de género y de edad, en unas condiciones dignas de admirar. Un Estado que ha sido reconocido por 84 estados de todo el mundo, con muchos de los cuales mantiene relaciones diplomáticas normalizadas y, en algunos casos, embajadas y embajadores permanentes”, matiza.
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