Colonialismo demográfico en el Sáhara Occidental: la estrategia de ocupación silenciosa de Marruecos – POR UN SAHARA LIBRE .org – PUSL

Colonialismo demográfico en el Sáhara Occidental: la estrategia de ocupación silenciosa de Marruecos – POR UN SAHARA LIBRE .org – PUSL

El Sáhara Occidental no está simplemente ocupado: está siendo sometido a una reurbanización sistemática y planificada. Si la comunidad internacional continúa mirando para otro lado, será cómplice de la eliminación de un pueblo de su propia tierra y de su propia historia.

Sáhara Occidental, 29 de mayo de 2025 – Mientras la atención internacional se centra ocasionalmente en las violaciones de los derechos humanos contra el pueblo saharaui, una de las herramientas más poderosas e insidiosas de la ocupación marroquí sigue siendo en gran medida ignorada: la colonización demográfica planificada. Iniciada con la invasión de 1975, esta estrategia se ha convertido en un componente central de la presencia marroquí en el territorio en disputa, transformando su estructura social, económica e identitaria de forma sistemática y aparentemente irreversible.


De la ocupación militar a la colonización civil:

En los primeros años de la invasión, la presencia marroquí se limitó a las fuerzas armadas, la gendarmería y el personal administrativo. Sin embargo, con el tiempo, Rabat ha iniciado una migración sistemática y fomentada de civiles marroquíes, promoviendo el asentamiento de familias enteras en las principales ciudades del Sáhara Occidental, como El Aaiún, Esmara y Dajla.
Según estimaciones autorizadas, hoy en día los colonos representan más del 65% de la población residente en el territorio, que supera los 500.000 habitantes. Una proporción que hace imposible cualquier referéndum creíble de autodeterminación, en abierta violación de las resoluciones de la ONU.

Incentivos y privilegios: el aparato estatal al servicio de la colonización

El proyecto colonial marroquí está respaldado por una sólida red de incentivos económicos y sociales. Los funcionarios transferidos al Sáhara Occidental reciben salarios incrementados de hasta el 85 por ciento, junto con beneficios como exenciones de impuestos, vivienda subvencionada, acceso privilegiado al empleo, servicios de salud e infraestructura moderna.
Estos privilegios, documentados también por el Departamento de Estado estadounidense y análisis parlamentarios como el informe del Bundestag alemán, revelan una clara intención política: transformar la composición demográfica del territorio para consolidar la anexión de facto.

Colonos e identidad: la construcción de una coexistencia desequilibrada

Muchos de los colonos marroquíes en el Sáhara Occidental no se perciben como ocupantes, sino como pioneros de una “reintegración nacional” patrocinada por el Estado. Esta narrativa distorsiona la realidad histórica y legitima una presencia colonial basada en la exclusión de los saharauis.
La vida cotidiana en los territorios ocupados está marcada por una coexistencia forzada y desigual: los colonos disfrutan de servicios y seguridad, mientras que los saharauis se enfrentan a la marginación, la vigilancia, la pobreza estructural y la represión política. Las fuerzas de seguridad marroquíes, omnipresentes en el territorio, a menudo se entrelazan con redes de colonos, desdibujando las fronteras entre la población civil y el aparato coercitivo.

Marroquíización cultural: la eliminación de la identidad saharaui

Además de la manipulación demográfica, Marruecos ha implementado un proceso sistemático de asimilación cultural. Esta “marroquinización” pretende desintegrar la identidad saharaui mediante:

–  La modificación de los topónimos tradicionales , sustituidos por versiones marroquíes;

–  La apropiación de las tradiciones saharauis , utilizadas como herramientas de marketing turístico;

–  La integración forzada de la cultura saharaui en un contexto estatal que niega su valor político.

Como en otros contextos coloniales, esta forma de violencia simbólica transforma la identidad del pueblo colonizado en una exhibición folclórica, vaciada de su historia y significado.


Violaciones del derecho internacional: una realidad ignorada

El artículo 49 del Cuarto Convenio de Ginebra es claro: se prohíbe el traslado de poblaciones civiles a territorios ocupados. Sin embargo, la comunidad internacional permanece en gran medida inerte. La Unión Europea sigue incluyendo al Sáhara Occidental en los acuerdos económicos con Marruecos, a pesar de las sentencias del Tribunal de Justicia de la UE de 2016 y 2018 que declararon que dichas prácticas eran ilegales en ausencia del consentimiento del pueblo saharaui.

El proyecto colonial marroquí no es sólo una cuestión de derechos humanos, sino un desafío al propio derecho internacional, que corre el riesgo de perder credibilidad si no se aplica de manera consistente.


Más allá de la ocupación: repensando la justicia en el Sáhara Occidental

Abordar el colonialismo de asentamiento en el Sáhara Occidental significa ir más allá de las manifestaciones obvias de la ocupación militar. Significa reconocer que los colonos son el motor silencioso pero fundamental de una estrategia de aniquilación política, cultural y económica.
También significa comprender que la solución nunca podrá ser meramente diplomática o técnica, sino que requerirá una reformulación radical de los paradigmas de justicia, autodeterminación y reparación.

El Sáhara Occidental no está simplemente ocupado: está siendo sometido a una reurbanización sistemática y planificada. Si la comunidad internacional continúa mirando para otro lado, será cómplice de la eliminación de un pueblo de su propia tierra y de su propia historia.

Origen: Colonialismo demográfico en el Sáhara Occidental: la estrategia de ocupación silenciosa de Marruecos