Sumar, Podemos, ERC, EH Bildu o BNG se han volcado para denunciar la situación de los activistas que piden asilo político. La presión a Marlaska llega también desde otros ámbitos como el de las organizaciones sociales y judiciales.
Los grandes focos políticos internacionales están puestos desde hace unos meses principalmente en Oriente Medio o Ucrania. Durante las últimas semanas, Venezuela o México también han irrumpido en el debate a nivel nacional. Pero en paralelo se ha reactivado la atención hacia un conflicto siempre latente, el del Sáhara Occidental. El caso de loas activistas saharauis retenidos en Barajas y solicitantes de asilo político han devuelto a primera plana la presión de las izquierdas hacia el ala socialista del Gobierno.
Sumar, Podemos, ERC, EH Bildu o BNG se han volcado en interesarse sobre la situación que existe en el aeropuerto madrileño. Allí, desde hace varios días se encuentran en huelga de hambre una treintena de activistas. El Ministerio de Interior, que dirige Fernando Grande Marlaska, ha denegado ya algunas de la solicitudes de asilo. Los activistas, procedentes de Marruecos o de los territorios ocupados saharauis, denuncian la persecución del reino alauita por sus ideas políticas.
Ayer solicité al Ministerio una visita a los saharauis retenidos en Barajas.
La han concedido el lunes 30 por la tarde, invitando a todos los miembros de la Comisión de Interior que lo deseen.
EH Bildu allí estará, esperemos que no sea demasiado tarde. https://t.co/cNNijYoLd1
— Jon Inarritu (@JonInarritu) September 27, 2024
Sumar, Podemos, ERC, EH Bildu o BNG se han volcado para denunciar la situación de los saharauis(…)