Por Álvaro García, maestro del CEIP Juan Carlos I (El Viso del Alcor). Fotografías de Paula Álvarez, Salec Hosein y el resto del equipo de periodistas escolares.
Sin darnos cuenta ha llegado ha llegado el último día del viaje. 6 días que han pasado ¡yahla, yahla! de un sitio a otra, de actividad en actividad.
El viernes, es el equivalente musulmán al domingo europeo. Hoy no hay colegio y es día de descanso y eso, en el desierto, suena hasta redundante.
Hoy podemos levantarnos un poco más tarde. Nuestra salida no está prevista hasta las 10; lo cual nos da para un descanso más prolongado y para un desayuno más sosegado. Y para que los que aún colean con la gastroenteritis puedan incorporarse al grupo con calma y en las mejores condiciones.
El desayuno es un momento más para la vida en «familia». Y en los salones alfombrados de las casas nos reunimos después de haber retirado las mantas que nos sirven de colchón. El desayuno se sirve en dos mesas bajas de quita y pon, con paras plegables, que llegan rodando desde la cocina. En bandejas nos traen la comida y hoy, pan de más y otros alimentos para hacer bocadillos. Nuestros anfitriones saharauis, en particular las mujeres, nos ayudan con los bocatas después de prepararnos el té.
Vamos a acompañar a la expedición de mujeres a la marcha reivindicativa en el campamento 27 de Febrero o Bojador («Bulldur»). (…)
(…)
LEER MÁS en: Diario de viaje a los campamentos saharauis. Día 6. – Escuela Sahara