
Delegaciones de países de África, Asia y América Latina (Bolivia, Cuba, Timor-Leste, Nicaragua, Etiopía, Angola, Mozambique, Sudáfrica, Namibia, Belice y Venezuela), recordaron que el Sáhara Occidental sigue siendo una cuestión de descolonización inconclusa, y llamaron a una resolución urgente del conflicto en plena conformidad con las resoluciones pertinentes de la Asamblea General y del Consejo de Seguridad de la ONU.
Insistieron en la primacía absoluta del derecho internacional y en la necesidad imperiosa de aplicar sin más demora las resoluciones de la ONU destinadas a permitir al pueblo saharaui ejercer libremente su derecho inalienable a la autodeterminación, mediante un referéndum libre, justo y transparente, como expresión auténtica de su voluntad.
Incluido desde 1966 en la lista de territorios no autónomos, y por lo tanto elegible para la aplicación de la Resolución 1514 de la Asamblea General de la ONU sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales, el Sáhara Occidental es la última colonia de África, ocupada desde 1975 por Marruecos, apoyado por Francia. SPS/APS