Destacó que este derecho fue posteriormente reforzado a través de la jurisprudencia de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), particularmente en su opinión consultiva de 2004 sobre el Muro en Palestina y su fallo más reciente de 2024 sobre las Consecuencias jurídicas derivadas de las políticas y prácticas de Israel en el Territorio Palestino Ocupado, incluida Jerusalén Oriental.

En su discurso durante una conferencia organizada en Ginebra sobre la cuestión del Sáhara Occidental, el profesor Andenes señaló que la sentencia de 2024 de la CIJ también debe leerse desde la perspectiva del Sáhara Occidental, especialmente en lo que respecta a las cuestiones de anexión, ocupación prolongada, traslado de colonos y construcción de asentamientos en territorio ocupado.

Añadió que el transcurso de cincuenta años desde la opinión consultiva de la CIJ sobre el Sáhara Occidental no altera el hecho de que, de ser consultada nuevamente, la Corte reafirmaría el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación. También señaló las implicaciones derivadas de la prolongada negación de este derecho y la expansión de la ocupación.

Andenes también revisó la labor jurídica de los abogados del Frente Polisario ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, destacando que estas sentencias, junto con la jurisprudencia de la CIJ, establecen claras obligaciones jurídicas para los Estados y terceros. Esto se debe a que el derecho a la autodeterminación es una norma imperativa de derecho internacional general (ius cogens) y una obligación contraída con la comunidad internacional en su conjunto (erga omnes).

Al concluir sus observaciones, el profesor destacó que la continua negación del derecho internacional en el Sáhara Occidental está directamente relacionada con las violaciones que sufre el pueblo saharaui sobre el terreno. Pidió redoblar los esfuerzos de documentación y la presión internacional para poner fin a esta situación ilegal.