El Gobierno ha asegurado que las solicitudes de asilo presentadas en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas se atienden «con independencia de la nacionalidad de la persona solicitante y sin establecer distinción por los motivos alegados en su declaración».
Así lo ha puesto de manifiesto en una respuesta escrita recogida por Europa Press a la pregunta registrada por Sumar en el Congreso sobre el tratamiento del Ejecutivo a personas saharauis reclamantes de asilo.
También explica «todas y cada una» de las solicitudes de protección internacional que se formalizan siguen las disposiciones establecidas en la Ley del derecho de asilo. Además, añade que contra aquellas resoluciones de inadmisión a trámite o de denegación de la solicitud se podrá, en el plazo de dos días contados desde su notificación, presentar una petición de reexamen que suspenderá los efectos de aquélla. En estos casos de solicitud de reexamen cabe la revisión de la solicitud presentada, así la como valoración de nuevas pruebas o información relevante que se pudiese aportar en cada caso.
Igualmente, Sumar destaca que el Ministerio del Interior ha denegado recientemente la entrada en España a un activista saharaui sordomudo en tratamiento por cáncer y a un matrimonio saharaui con una niña de año y medio, que abandonaron el Sáhara Occidental «para huir de la represión de las autoridades marroquíes». «Esto se suma a la también reciente controversia por asignar un traductor marroquí de un dialecto distinto al que hablaba otro refugiado saharaui», indica.
Finalmente, defiende que «todo solicitante tiene derecho a ser asistido por un intérprete en un idioma que el mismo entienda y en el que pueda expresarse».