El Gobierno de Canarias ha propuesto a Marruecos que la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) aloje en centros en territorio marroquí a los menas de esa nacionalidad que han llegado en patera a las islas. Según ha explicado el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, en una visita a la Universidad Politécnica Mohamed VI en Benguerir, esta iniciativa permitiría que los menores puedan ser atendidos en su país de origen mientras Canarias mantiene su tutela legal.

Clavijo ha señalado que esta opción, discutida previamente con el ministro de Asuntos Exteriores marroquí, Naser Burita, se ajusta a la Ley de Extranjería española. Durante su visita a Rabat a inicios de octubre, Burita expresó la disposición de Marruecos para recibir a menores que entraron ilegalmente en Europa, aunque precisó que hay «complicaciones» debido a vacíos legales en la normativa europea.

Desde entonces, Clavijo ha mantenido reuniones adicionales con la OIM y con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) para explorar esta alternativa. La fórmula planteada evitaría el desarraigo de los menores y les ofrecería una asistencia más adecuada en un entorno familiar y cultural cercano, todo bajo la supervisión y responsabilidad de la comunidad autónoma canaria.

Clavijo ha insistido en que no se trata de un proceso de «repatriación» en el sentido estricto, ya que la tutela continuaría en manos del Gobierno de Canarias. La propuesta facilitaría que los menores reciban atención adecuada sin necesidad de trasladarlos a otros lugares de acogida en España, una opción legal amparada en el artículo 35.2 de la Ley de Extranjería. Esta norma permite a las comunidades autónomas firmar acuerdos con países de origen para ofrecer a los menores atención en su contexto de procedencia.

La comunidad canaria supervisaría la documentación de los menores en España, y al alcanzar la mayoría de edad, los jóvenes tendrían la posibilidad de decidir su residencia. La idea es que durante su estancia en centros de la OIM en Marruecos, permanezcan bajo la protección de Canarias, evitando así que pierdan sus raíces culturales y familiares.

Actualmente, el Gobierno de Canarias tutela a unos 6.000 menas de diferentes nacionalidades africanas, que han llegado en pateras o cayucos a las costas del archipiélago. Este número continúa en aumento, pues en algunas ocasiones se ha registrado la llegada de embarcaciones con decenas de menores, como ocurrió recientemente en Gran Canaria con un cayuco proveniente de Gambia con 231 personas a bordo, incluidos varios menores.