Por Lehbib Abdelhay/ECS
Madrid (ECS).- El 12 de Octubre de 1975 marcó la caída definitiva de los planes colonialistas de España y Marruecos en el Sáhara Occidental, paralelamente, la sociedad civil saharaui se adentró en una nueva era histórica marcada por las dinámicas de lucha y resistencia pacíficas.
ECSAHARAUI, mediante una entrevista exclusiva a un testigo primario y fiel a los acontecimientos, realiza una reconstrucción de los eventos que concretaron uno de los cambios más importantes de nuestra era: la proclamación de la Unidad Nacional Saharaui, un modelo político y social que tendría repercusiones mucho más allá de las fronteras saharauis. El impacto generado dio lugar a la creación de una sociedad vigorosamente cohesionada, cimentada bajo el objetivo común y poniendo en cuestión la noción de que las sociedades en conflicto son incapaces para generar bases encaminadas a la construcción de la paz y estructuras sociales.
Para entrar en contexto, nos situaremos en el 17 de Junio de 1970 en El Aaiún, donde tienen lugar los incidentes de Zemla en el que las autoridades españolas (La Legión) reprimen a sangre fría a un grupo de manifestantes saharauis que reivindicaban la independencia en la Plaza de Jatarrambla, dejando un saldo de más de una decena de muertos, cientos de heridos y secuestrando a quien fuera el organizador y padre de la independencia saharaui, Sidi Brahim Bassiri, tras estos dramáticos sucesos hubo un descontento generalizado entre la población saharaui, que fue acentuando su rechazo a la presencia española en su territorio, saliendo a las calles durante los siguientes 5 años para protestar por la independencia a pesar de ser brutalmente perseguidos por la Policía Territorial.
Bajo estas circunstancias, se dieron los factores propicios que desembocaron en 1975 con la articulación de un movimiento que unificaba el malestar extendido entre la población soberana, de modo que así se podrían enfrentar al poder colonial como un cuerpo sólido y organizado.
ECSAHARAUI entrevista al último y único superviviente del audaz trío (El Uali Mustafa Sayed y Mahfud Ali Beiba) que diseñó la unidad nacional saharaui, Sidahmed Batal. Los episodios que se narran a continuación relatan la concatenación de hechos que originaron el germen de la unidad nacional saharaui y su posterior acaecimiento:
La Convención de la Unidad Nacional Saharaui proclamada en Aín Ben Tili.
– Sr. Sidahmed, ¿Nos podrías hablar de los momentos previos a la proclamación de la Unidad Nacional Saharaui? ¿Por qué la Unidad Nacional?
El encuentro que tuvimos en Ain Ben Tili a finales de 1975 fue una respuesta a la invasión marroquí que se avecinaba en aquellos días y para crear una unidad nacional de todos los saharauis para afrontar las amenazas de la invasión extranjera. En aquel día, todos los asistentes, entre ellos notables saharauis de la Asamblea General saharaui creada por España proclamaron su adhesión al Frente Polisario como único representante legítimo del pueblo saharaui.
Días anteriores a la reunión principal que íbamos a celebrar en Ain Ben Tili, los dos dirigentes del Frente Polisario por entonces, El Uali Mustafa Sayed y Mahfud Ali Beiba, iniciaron los primeros encuentros con la sociedad civil saharaui en distintos lugares de Mauritania, Argelia y en el sur de Marruecos con el objetivo de invitar a agrupaciones saharauis a acudir al encuentro que se celebraría el día 12 de Octubre en la primera localidad que liberamos y en la que nos sentíamos seguros ante cualquier intento de sabotaje por parte de las autoridades españolas, es por ello que elegimos Aín Ben Tili.
Posteriormente a la proclamación, y a consecuencia de la represión, la militancia nacionalista saharaui se dispersó por temor y, desgraciadamente muchos de sus integrantes se refugiaron en países vecinos, donde encontraron ayuda de las comunidades saharauis allí residentes y se reorganizaron. En 1975 de nuevo empezaron a formarse grupos nacionalistas en las ciudades de los mismos países.
Ahora nos encontramos celebrando 45 años de unidad y cohesión política, donde los saharauis anunciaron su adhesión a los principios del Frente Polisario y su total disposición al sacrificio en honor a los nobles objetivos por los que se desencadenó la lucha armada contra el colonialismo español el 20 de mayo de 1973.
– ¿A qué agrupaciones lograron convencer los ex líderes El Uali Mustafa Sayed y Mahfud Ali Beiba a principios de Octubre del 75′ para acudir a la reunión principal?
Durante los días 10, 11 y 12 de Octubre de 1975 estuvimos de reuniones y desplazamientos en el desierto. Nos movimos mucho y nos repartimos la tarea cada uno en función de sus contactos y alcance personal, al final logramos más de nuestras expectativas. Contactamos con la Asamblea General, conocida como La Yemaa’, con los comerciantes de la región y con todas las organizaciones y agrupamientos saharauis que agitaban por entonces las calles.
También contactamos con el PUNS (Partido de Unión Nacional Saharaui) una formación política fiel a los intereses de España en el Sáhara pero que nos podía servir de ayuda para acercarnos al enemigo.
El mártir El Uali Mustafa Sayed se encargó de convencer a los jefes de la Asamblea General. Mantuviendo reuniones y conversaciones con Jatri Said Yumani (presidente de la Yamáa), Baba Hasanna, Saila Abeid, Ahmedu uld Lbachir y Sueilem uld Ahmed Brahim. También con Dih uld Naucha, quien fuera representante del PUNS. Finalmente y con todos los apoyos conseguidos, celebramos decididos y con entusiasmo, la gran reunión en Aín Ben Tili, ya que como dije antes es la primera región liberada del colonialismo español.
– Conociendo las condiciones y la vida de lujo que varios jefes de tribus se permitieron vivir bajo el dominio español, ¿Cómo han podido convencer los miembros de la Asamblea General?
En la reunión de Aín Ben Tili, todas las formaciones políticas, sociales y tribales acordaron y se adhirieron a los principios del Frente Polisario, lo que implicó el abandono de ese tipo de vida y el comienzo de la lucha clandestina. Recuerdo que Mahfud Ali Beiba leyó el primer manifiesto del Frente Polisario dirigido a los participantes allí presentes, que no excedíamos unas 220 personas, posteriormente El Uali pronunció un discurso en nombre del pueblo saharaui.
Por lo tanto, todos los allí presentes; personalidades de todas las fuerzas políticas partidarias de la independencia: representantes, miembros de La Yemáa y algunos dirigentes del PUNS, sin excepción, acordaron que el Frente Polisario es el único y legítimo representante del pueblo saharaui. Una vez ya concluida la reunión, se pactó la disolución de la Asamblea General (Las Cortes del Sáhara) creada por España y que dependía directamente de ellos.
Después de debates intensos cómo debía ser la lucha, el Frente Polisario coronó sus esfuerzos político-militares con la realización, el 12 de octubre de 1975, de la Convención para la Unidad Nacional. Es preciso señalar que para entonces ya existía un acuerdo entre España y el reino de Marruecos para la entrega del territorio saharaui.
Finalmente, todos nosotros al mando y bajo la presidencia de El Uali Mustafa Sayed, proclamamos la unión del pueblo en torno al programa y las estructuras del Frente Polisario con el objetivo de alcanzar la independencia y defender la integridad territorial del Sáhara Occidental. En nuestro programa acordábamos:
– Liberar la nación de todas las formas de colonialismo y alcanzar una independencia completa.
– Edificar un régimen republicano nacional con participación activa y efectiva de la población.
– Construir una auténtica unidad nacional.
– Crear una economía nacional basada en el desarrollo agropecuario e industrial, la nacionalización de los recursos mineros y protección de los recursos marinos.
– Garantizar las libertades fundamentales de los ciudadanos.
– Distribuir de forma justa las riquezas y eliminar desequilibrios.
– Anular toda forma de explotación.
– Garantizar la vivienda a todo el pueblo.
– Restablecer los derechos sociales y políticos de la mujer.
– Establecer la enseñanza gratuita y obligatoria en todos los niveles y para toda la población.
– Combatir las enfermedades, construir hospitales y ofrecer atención médica gratuita.
– La retirada de España meses después no dejó un vacío en el poder porque se proclamó la RASD.
– Un vacío en el poder es inadmisible para el Frente Polisario.
– El Frente Polisario despliega representantes de su organización política en todas las ciudades saharauis.
– Durante el periodo de represión y cacería desplegado por los legionarios, ¿hubieron más reuniones?
Algunos huyeron por temor hacia ciudades mauritanas colindantes con el Sáhara Occidental, Argelia y Libia, es una reacción de lo más normal, aún así volverían más tarde para unirse a la lucha armada que daba inicio en esos meses.
Claro que hubo otra reunión más. Dos meses después de sellar la unidad nacional, tuvimos otro encuentro en la ciudad de Güelta el 28 de noviembre de 1975, posterior a la Convención de Ben Tili. Donde añadimos más puntos a lo ya acordado, que eran:
– Forzar la disolución definitiva de la Asamblea General (La Yemaa).
– Fundación del Consejo Nacional Saharaui (el Parlamento).
– El Acuerdo (documento) del Güelta.
– Ultimar la proclamación de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD).
Entonces, un equipo formado por miembros del Consejo Nacional Saharaui con Mahfud Ali Beiba a la cabeza, realizó su primera visita oficial a Argel, siendo Argelia el primer aliado del pueblo saharaui, lo que nos motivó aún más. Tres meses después, el 26 de febrero de 1976, España se retira del Sáhara Occidental, y el Frente Polisario procede a crear las Comisiones Populares.
Un día después, el 27 de febrero de 1976, el Frente Polisario anuncia la proclamación de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD). Entonces se anuncia la creación de: La Organización Política del Frente Polisario, El Estado saharaui y el Ejército Popular de la Liberación Saharaui (EPLS) como garantes de la Unidad Nacional.
Nuestros principales objetivos eran por entonces aglutinar al pueblo del Sáhara Occidental bajo el paraguas de un sólo y único representante legítimo con el objetivos de construir un estado moderno en el contexto de una integración regional magrebí. En el plano internacional, nosotros como representantes del Frente Polisario, defendimos la creación de un Estado palestino, la unidad del mundo árabe y la eliminación de toda forma de colonialismo en África.
– Después de 45 años de este evento tan importante para la lucha saharaui, ¿Cómo ve hoy día la unidad nacional saharaui? ¿Y que hay de la lucha armada? ¿Qué mensaje desearía enviar a la juventud saharaui?
No cabe la menor duda de que el ser humano se va transformando como persona dependiendo de su entorno. En nuestro caso, los saharauis, independientemente de dónde nos criemos, tenemos un denominador común; la lucha por la libre autodeterminación de nuestra patria.
Ante la obstrucción y el estancamiento actual, la sociedad saharaui se impacienta y es una reacción natural, la actual situación de estancamiento es el resultado de la sistemática política de intransigencia y bloqueo continuo efectuado por Marruecos y Francia.
En este estancamiento, las líneas del Frente se han movido desde el árido desierto hasta el ámbito de los medios y la diplomacia. Las experiencias de la guerra han demostrado que las percepciones internacionales de conflictos son uno de los factores más importantes para determinar sus resultados.
En estas circunstancias, es improbable que se mantenga el statu quo, y cada parte en este conflicto (el Frente Polisario y Marruecos) ha renovado las razones para buscar una solución, ya sea para detener las nuevas arenas movedizas o para anticiparse a la política exterior de los prominentes gobiernos occidentales.
Hoy en día, la juventud saharaui es considerada, por el resto de componentes de su pueblo y por ella misma, la masa que garantizará la continuidad de nuestro proyecto nacional, un proyecto iniciado por jóvenes que han conseguido, en menos de 30 años, imponer el deseo de un pueblo que sus enemigos quiere anular.
Para nuestra causa, los tiempos han cambiado y los factores externos e internos también, nos encontramos ante una nueva era en la trayectoria de nuestro proyecto. Todo ha cambiado excepto el objetivo y nuestra unidad nacional, de hecho es irreversible. Todo ha cambiado excepto el espíritu de lucha de nuestro pueblo. Todo ha cambiado pero con los logros ya conseguidos no hay vuelta atrás, no habrá vuelta atrás.
Ahora, la juventud saharaui, está ante un gran reto; deben demostrar otra necesaria capacidad de asimilación de nuestro histórico rol tal y como lo hicieron nuestros mártires siendo jóvenes al inicio de la revolución. El Frente Polisario es la ideología y el ideal salvador de nuestro pueblo de la salvaje invasión colonialista.
El que no tolere críticas de ministros, que no cometa errores. Creo que debemos iniciar un serio debate de crítica y autocrítica para empezar a asimilar nuestras responsabilidades y practicarlas, porque este gran reto cada día es más evidente y debemos prepararnos para enfrentarnos a el y solucionarlo, pues no tenemos otra opción si queremos ser dueños de nuestro futuro, porque, o la juventud saharaui toma las riendas y continúa el camino hacia la libertad de su pueblo, o el enemigo ganará, y no por su fuerza, sino por nuestra debilidad y falta de evaluación propia.
*Esta entrevista fue realizada en dos partes; la primera tuvo lugar el 02 de octubre de 2020 en vísperas de la celebración del Día de Unidad Nacional en los campamentos de refugiados saharauis. Desde entonces, y por circunstancias obvias, se completó por vía telefónica. © ECSAHARAUI 2020.