El líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, ha criticado al secretario general de la ONU, António Guterres, por no «responsabilizar plenamente» a Marruecos de la ruptura del alto el fuego entre ambas partes en noviembre de 2020 a pesar de los numerosos informes de Naciones Unidas publicados al respecto, todo ello en respuesta al informe del organismo respecto a la cuestión, que será presentado este miércoles ante el Consejo de Seguridad.
«Este es el cuarto informe publicado desde que el Estado ocupante marroquí documentó, violó y socavó materialmente el alto el fuego de 1991 y los acuerdos militares conexos. Sin embargo, todavía no podemos entender por qué la Secretaría de la ONU sigue absteniéndose de llamar a las cosas por su nombre y de responsabilizar plenamente al Estado ocupante de las consecuencias de su violación del alto el fuego», ha escrito Ghali en una carta dirigida a Guterres y publicada por la agencia de noticias saharaui SPS.
En ese sentido, ha afirmado que Marruecos «atacó a civiles saharauis» en Guerguerat el 13 de noviembre de 2020, lo que dio inicio a la reanudación de un conflicto en el que había imperado un alto el fuego desde 1991.
«El hecho de no exigir responsabilidades al Estado ocupante por su violación del alto el fuego de 1991 no solo equivale a tolerar la impunidad y la falta de rendición de cuentas, sino que también socava la confianza del pueblo saharaui y de sus dirigentes en Naciones Unidas y en el proceso de paz que éste está impulsando en el Sáhara Occidental», ha añadido Ghali.
A pesar de ello, ha destacado la continua colaboración del Polisario con la Misión de Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental (MINURSO), a la que ha ayudado a mejorar sus cadenas de suministro sobre el terreno, razón por la que precisamente ha lamentado que los funcionarios de la Misión hayan rechazado reunirse con altos cargos del Polisario en territorio saharaui por «temor a represalias» por parte de Marruecos, a quienes han acusado de realizar una «constante política de chantaje».
Ghali también ha recordado que Marruecos «sigue poniendo en peligro la seguridad de los observadores militares de la MINURSO» y que ha llegado a amenazar a civiles saharauis al servicio de la misma incluso cuando iban «acompañados de patrullas» de las mismas.
«Lamentablemente, la MINURSO parece haber sucumbido a la presión del Estado ocupante, lo que pone en duda la imparcialidad y la credibilidad de la Misión. Además, la potencia ocupante marroquí está haciendo todo lo posible, con total impunidad, para obstaculizar la plena aplicación del mandato de la MINURSO. Incluso llegó al extremo de expulsar al personal civil de la Misión, incluidos los observadores de la Unión Africana, en marzo de 2016», ha agregado el líder del Polisario.
Además, ha aseverado que Marruecos también niega a la MINURSO el acceso a los interlocutores locales, lo que «sigue limitando gravemente su capacidad de obtener información fiable sobre la situación», por lo que ha instado al Consejo de Seguridad de la ONU a pedir que la Misión tenga acceso sin restricciones a estos.
VIOLACIONES DE DDHH
En base a ello, el líder del Polisario también ha criticado que la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos lleve nueve años consecutivos sin poder visitar el Sáhara Occidental a pesar de las peticiones del Consejo de Seguridad.
Asimismo, ha mencionado el informe del organismo en el que se hace eco sobre informes de «obstrucción, intimidación y acoso a activistas saharauis que defienden el derecho a la libre determinación», señalando que en este no se recogen «las violaciones sistemáticas de Derechos Humanos cometidas por las autoridades de ocupación marroquíes contra civiles saharauis y defensores de los Derechos Humanos».
De igual forma ha aseverado que Marruecos usa «todo tipo de armas», destacando los drones, para «matar brutalmente» a los civiles saharauis tanto dentro del territorio de la República Árabe Saharaui Democrática como en los países vecinos donde sus habitantes se refugian, unas acciones que el Polisario considera como «crímenes de guerra» en base a los estatutos del Tribunal Penal Internacional (TPI).
Tras ello, ha desmentido los informes marroquíes respecto a la detección de 14 drones del Polisario sobre su territorio, afirmando que es Rabat el «único que usa todo tipo de armamento sofisticado y letal».
Respecto a la situación de los presos saharauis, Ghali ha mencionado las «duras y deplorables condiciones en las que se encuentran recluidos», y ha denunciado que las autoridades carcelarias les someten a «prácticas degradantes y vengativas».
Por último, ha criticado que Marruecos «no tiene voluntad política alguna para alcanzar una solución pacífica» para lograr la descolonización del Sáhara Occidental, tras lo que ha reiterado su defensa del derecho a la autodeterminación como solución al conflicto.