Chahid Alhafed, 02 Agosto de 2020. – (ECSAHARAUI)

Los campamentos de refugiados saharauis viven una crisis económica sin precedentes a causa del estado de alarma declarado por la Covid-19 y los efectos de la pandemia a nivel mundial.

Si no se brindan soluciones dentro de los campamentos, la mayoría de las familias pasan a la etapa del colapso económico total debido a la falta de alimentos y el parón económico.»La pandemia global sigue siendo el principal motor de la inseguridad alimentaria. La pérdida de medios de subsistencia e ingresos y la falta de los productos básicos también son factores que contribuyen a la reducción de la capacidad de las familias refugiadas para comprar alimentos», señala una refugiada del campamento de El Aaiún.

La situación sanitaria actual en los campamentos y las ciudades vecinas no requiere un estado de alerta y un confinamiento total, el ciudadano necesita volver a la vida normal para mantenerse y buscar los pocos ingresos para sobrevivir.

El liderazgo político tiene soluciones estériles, que se basan en las simulaciones de políticas internas de otros vecinos países en los que la situación sanitaria ya exige movilización.

Después de cuatro meses de pandemia por Covid-19, el pueblo saharaui sufre los efectos de la crisis sanitaria. El presidente de la Media Luna Roja Saharaui, Yahia Bouhubeini, pidió ayer a los países donantes brindar ayuda humanitaria para los miles de refugiados saharauis.