Desde hace varios años el régimen marroquí ha patentado la política del berrinche infantil, dentro de las relaciones internacionales. Un truco que está utilizando con sus padrinos políticos y que le está dando muy buenos resultados. 

El disgusto consiste en montar un enfado infantil, con excusas peregrinas, que no tienen nada que ver con el objetivo final  que se pretende conseguir con ese berrinche.

La táctica es buscar cualquier pretexto y convertirlo en una desavenencia con estos países, el paso siguiente es darlo a conocer públicamente  en un comunicado o con la retirada del embajador.

El régimen marroquí, vive y existe por y para el Sahara Occidental. No tiene otra política, ni otras preocupaciones, su única obsesión se llama El Sahara Occidental y es la que está detrás de todas sus relaciones, estrategias, tácticas, berrinches, chantajes, extorsiones y claro está de su piratería de los recursos naturales del territorio Saharaui.

Para que se hagan una idea de la psicopatia paranoica del régimen dictatorial marroquí,  en relación con el asunto del Sahara Occidental. Tan solo tres horas después del terrible terremoto que asoló el centro de Marruecos, El perturbado ministro de exteriores Bourita publicaba un Twit sobre una presunta victoria del Majzen en relación con el conflicto del Sahara Occidental. Victoria pirrica conseguida a través de un soborno a varios políticos peruanos.

El Sahara Occidental es la franquicia y la razón de ser y de existir del régimen feudal marroquí.Tan solo hay que repasar las dos empresas que controlan más del 60% de PIB marroquí, OCP («pública») y Almadda propiedad de los cleptomanos Alauitas.

Los ejemplos más recientes de esta política del berrinche infantil, lo encontramos con Alemania y España.

En el caso de Alemania, el Majzen utilizo dos pretexto triviales;  la protección que está ofrecio a un opositor marroquí y la no invitación del régimen marroquí a una conferencia internacional,  de pacificación de Libia, que se celebró en Berlín. Con estas estúpidas coartadas, la dictadura marroquí retiro su Embajadora en Alemania y suspendió la colaboración con la Embajada alemana en Rabat. El pulso duro varios meses, y con la salida del poder  de la canciller Merkel y la llegada del débil Olaf Scholz, un político con un inusual perfil alemán, que acabo cediendo ante el chantaje del régimen marroquí, que acabo consiguiendo un carta del presidente alemán dando la bienvenido a la ilegal autonomía que ofrece Marruecos para el  Sahara Occidental.

En el caso español, fue más sonado y mucho más descarado por parte del Majzen marroqui; el berrinche consistio en mandar una invasión de inmigrantes de 10 mil personas, incluído 4 mil niños a la ciudad de Ceuta. Está extorsión, sumada al espionaje de Pegasus, provoco la vergonzosa capitulacion de Sánchez ante la autocracia marroqui.

Sin embargo, el truco del berrinche, propiedad exclusiva del Majzen marroquí, no ha funcionado de momento con su principal valedor y padrino, Francia.

El espionaje marroquí a Macron y 14 de sus ministros es la principal causa, de la negativa momentánea francesa, a ceder a la extorsion marroquí.

Pero será cuestion de tiempo, ver al Eliseo ceder ante el  chantaje de la narco monarquía marroquí.

El berrinche infantil,  está salpicando a todos los aliados de Marruecos que osen defender la aplicación de la  legalidad y el derecho internacional en el Sahara Occidental. Todo indica, que incluso, el gran imperio americano está siendo en los últimos días objeto de la política del berrinche infantil, por sus intentos de mediación para encontrar una solucion definitiva al conflicto del Sahara Occidental.

Marruecos, al ser régimen desfasado y de otra época, la política y en especial las relaciones internacionales, las entiende, solo,  desde su prisma feudal, es decir a través del chantaje, el sobornos o de su nueva patente de Corso el berrinche infantil.