Los representantes saharauis visitarán la Eurocámara el próximo martes, un encuentro que desde el grupo de Marine Le Pen han intentado evitar.
María G. Zornoza
Representantes del Frente Polisario asistirán el próximo martes al Parlamento Europeo, lo que ha desatado la cólera de la extrema derecha francesa. El objetivo es su participación en una reunión en el marco del Grupo para el Magreb de la Comisión de Comercio Internacional que busca abordar el reto de los futuros acuerdos comerciales y de pesca tras las últimas sentencias del Tribunal de Justicia de la UE (TJUE).
La cita ya empieza a levantar polvo en los pasillos de la Eurocámara. La eurodiputada Ana Miranda, del Bloque Nacionalista Galego, y el eurodiputado francés Thierry Mariani, de la extrema derecha de Reagrupamiento Nacional -el grupo de Marine Le Pen-, han chocado en el Pleno de Estrasburgo después de que el político galo intentase boicotear la presencia de los saharauis en la cámara. “El Artículo 10 de nuestro reglamento interno estipula que los disputados preservarán la dignidad del Parlamento y no atentarán contra su reputación (…) A puertas cerradas en Bruselas, la extrema izquierda invita al Frente Polisario, milicia separatista proargelina (no reconocida por la ONU), a hablar con los eurodiputados. Y esto con total desprecio por la soberanía de Marruecos, la diplomacia de nuestros Estados miembros y las realidades políticas”, afirma el político ultra.
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