Por Mah Iahdih Nan – OPINIÓN
Madrid (ECS).- Marruecos lleva varios años intentando vender la falacia de que es la puerta de África, como parte de una estrategia que vende a nivel de Europa y América Latina con la que intenta engañar y engatusar a los países de estas zonas, pero la realidad dista bastante de esta propaganda. La práctica dice que Marruecos tan sólo tiene como conexión terrestre con África un paso ilegal que viola la legalidad y e derecho internacionales, usado básicamente por el régimen marroquí para la exportación de su principal producto interior bruto, el cannabis y productos hortofrutícola sobrantes de sus exportaciones a Europa. La practica nos ha demostrado que Marruecos no le interesa lo más mínimo la suerte de los africanos, lo único que pretende es saquear sus riquezas y utilizarlos para sus intereses políticos, este es el verdadero resultados de unas relaciones insanas y deshonestas.
África es un continente que ha sido víctima a lo largo de la historia de todo tipo de colonizadores, saqueadores y ladrones, sin embargo, con la entrada del siglo XXI, esos colonizadores dieron paso a una nueva estirpe formada por carroñeros que han llegado para esquilmar lo poco que han dejado sus antecesores para rematar y mantener en la pobreza y la miseria a la mayor parte de los pueblos africanos.
Uno de los casos más claros y notorios es el ejemplo de Marruecos que empezó en la las postrimerías del siglo XX como aprendiz y testaferro de Francia en toda la francófona africana y acabó siendo uno de los mayores usureros y saqueadores del continente.
La empresa Managem Groupe forma parte del Holding AL-MADA, propiedad del Rey de Marruecos y de grupos financieros franceses, es dueña prácticamente de casi todos los negocios prósperos en Marruecos y explota de forma indiscriminada y abusiva minas de oro, diamantes, cobre, cobalto, plomo, plata y cinc en nueve países africanos: Sahara Occidental, Gabon, Mali, Guinea Conakry, Sudan, Etiopia, Republica Democrática del Congo, Costa de Marfil, Burkina Faso.
La explotación humana que practica Managem Gruop en algunos de estos países es incluso homologable a la era de la esclavitud, hay constancia de mineros en el Congo, Mali, Bukina Faso y Costa de Marfil que trabajan de sol a sol por un plato de comida o por el valor de 45 euros mensuales. Las condiciones de trabajo son inhumanas, sin materiales de protección ni condiciones de seguridad adecuadas, lo que provoca continuos e innumerables accidentes de trabajo que matan anualmente a miles de mineros, sin ningún derecho ni indemnización. Así mismo existe la constancia, denunciada por diversos organismos en todos estos países de explotación infantil, como mano de obra en estas minas.
Los minerales extraídos de estas minas son trasladados a Marruecos o Francia de forma ilegal sin respetar ninguno de los procedimientos que rigen el comercio mundial, prácticamente de forma clandestina, un pillaje en toda regla, es la nueva modalidad de la piratería del siglo XXI.
La convivencia entre el Majzén marroquí, el estado Francés y la mayoría de los dictadores del África francófona ha propiciado un sistema de saqueo y rapiña que sólo beneficia a estas tres partes y donde los pueblos africanos quedan al margen de beneficiarse de sus propios recursos.
Francia después de conceder la ficticia independencia a sus colonias a mediados del siglo pasado, instauró un nuevo plan neocolonial a principios de este siglo y para tapar y maquillar el saqueo, introdujo en la ecuación al Majzén marroquí como testaferro y beneficiario de este masivo robo que sufren los pueblo africanos.
El trasiego de negocios a tres bandas, Francia-régimen marroquí-dictadores africanos ha sido hábilmente aprovechado por el Majzén marroquí para convertirlo en un arma más, en su guerra por aniquilar al pueblo Saharaui. Desde su salida de la extinta OUA, el año 1984, hasta su vuelta a UA el año 2017 siempre ha utilizado a dictadores y corruptos dirigentes del África francófona contra la lucha del pueblo Saharaui, son incontables los sobornos y prebendas que el Majzén marroquí uso para comprar la voluntad de de algunos dirigentes africanos corruptos para después lanzarlos a defender sus postulados en la organización africana; viajes, regalos, incentivos monetarios, edificaciones, vehículos, vacaciones, atenciones sanitarias, becas, participación en eventos… etc.
Las deshonestas relaciones de Marruecos con el África francófona, nos dejan como conclusiones, por un lado el enorme pillaje y robo de los recursos africanos a costa del empobrecimiento de estos pueblos y por otro lado el uso torticero e inmoral de la corrupción política para la persistencia del modelo neocolonial semi esclavista que nunca dejará margen de progreso a los pueblos africanos.
Origen: Las deshonestas relaciones de Marruecos con África