Un contexto tenso para Marruecos
Marruecos se encuentra en una situación diplomática compleja. La cuestión del Sáhara Occidental sigue siendo uno de los principales retos de política exterior del reino, que busca el reconocimiento internacional de su soberanía sobre este territorio. Para lograrlo, Marruecos está implementando diversas estrategias, a menudo controvertidas, para debilitar a sus oponentes. Mauritania, aunque fiel a su neutralidad, se está convirtiendo en un actor clave en este juego geopolítico, de ahí la importancia para Marruecos de mantener un control sutil sobre las decisiones políticas del país.
Este nuevo caso de espionaje evoca el caso Pegasus , en el que Marruecos fue acusado previamente de utilizar software israelí para espiar a políticos y periodistas de todo el mundo. Investigaciones realizadas por periodistas y organizaciones de derechos humanos revelaron que los teléfonos de varios funcionarios gubernamentales, incluidos los de España y Francia, habían sido pirateados. Estas revelaciones provocaron una protesta internacional y dañaron la imagen de Marruecos, a pesar de sus intentos de defenderse alegando que sus acciones se ajustaban a los estándares internacionales.
Las revelaciones de Hicham Grindo
Hicham Grindo es un activista político marroquí conocido por su postura contra el gobierno de Rabat y sus denuncias de corrupción y abuso de poder. Exiliado en Canadá, reveló regularmente información sensible sobre las prácticas del régimen marroquí, atrayendo la atención de los medios de comunicación y las autoridades. En este nuevo caso, Grindo alegó que Marruecos, en colaboración con los Emiratos Árabes Unidos, desplegó tecnología de vigilancia para vigilar a políticos, periodistas y empresarios influyentes en Mauritania.
Grindo, cuya familia ha sido víctima de numerosos ataques legales debido a sus revelaciones, también advirtió a Mauritania, aconsejándole que recurra a expertos para verificar estas intrusiones informáticas. Afirma que su información proviene de fuentes fiables y se comprometió a seguir denunciando lo que él llama «prácticas desleales» del régimen marroquí.
Además, es probable que este nuevo caso de espionaje tenga repercusiones en las relaciones de Marruecos con varios Estados, en particular con aquellos que apoyan la causa saharaui o se han visto directamente afectados por el uso de tecnología de vigilancia. De confirmarse las acusaciones, Marruecos podría enfrentarse a una mayor presión diplomática, sobre todo porque los casos de espionaje anteriores no han sido olvidados.
Origen: Le Maroc accusé dans une nouvelle affaire d’espionnage