El Gobierno marroquí consideró inoportuna la prevista visita del enviado de la ONU para el Sahara Occidental, Christopher Ross, a la región por coincidir con los preparativos electorales del país magrebí, dijo el embajador marroquí ante la ONU, Omar Hilale.

«El contexto actual no es idóneo para una semejante visita. Marruecos se encuentra en plena campaña electoral para las legislativas (del 7 de octubre), y posteriormente habrá un nuevo Gobierno», subrayó Hilale en una entrevista con la agencia oficial marroquí MAP.

Hilale añadió que estas razones fueron «bien entendidas» por los miembros del Consejo de Seguridad; así como recordó que el predecesor de Ross, Peter Van Walsum, no realizó una gira por la zona durante las legislativas marroquíes de 2007.

En las pasadas semanas, Ross dirigió a Marruecos, al Polisario y a varios países vecinos una «propuesta formal» para viajar a la región en un intento para relanzar la negociación sobre el futuro del conflicto, según dijo el pasado 1 de agosto Farhan Haq, portavoz del secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon.

Ross, que no ha vuelto a la región desde el pasado febrero, ha tenido en el pasado una serie de desencuentros con Rabat que lo considera demasiado próximo a la tesis independentista del Frente Polisario.

En noviembre de 2015, el ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Salahedin Mezuar, cuestionó la labor de Ross en una entrevista con Efe que su Gobierno le prohibía viajar al territorio del Sáhara que Rabat controla y que su labor de mediación debía realizarse únicamente en la capital marroquí.

Esto se suma a la «retirada de confianza» que el Gobierno marroquí decretó en mayo de 2012 sobre la persona de Ross, aunque entonces Ban Ki-moon intervino para apoyar al diplomático estadounidense y Marruecos tuvo que retractarse y aceptar su continuidad.