FOTO. La ovetense Sol Espías, junto con un grupo de niños saharauis
La asociación Renacer en la Arena organiza este acto con el que pretende recaudar fondos para sembrar esperanza donde parece no haberla
Han pasado más de cinco décadas y la realidad de los miles de refugiados saharauis continúa siendo preocupante. «Lo que viven estas personas es más que una injusticia», afirma Sol Espías. La ovetense recuerda que «pasaron de tener una vida digna a quedarse sin nada, convertidos en apátridas y obligados a sobrevivir en condiciones extremas». Como es incapaz de mirar hacia otro lado ante la desigualdad, esta ovetense dedica ahora sus esfuerzos para acompañar a esta comunidad, dar visibilidad a su situación y reclamar respuestas que garanticen sus derechos fundamentales.