Desde hace un par de años el conflicto del Sáhara Occidental ha sido uno de los asuntos que más críticas políticas le han generado al Gobierno de Pedro Sánchez. La decisión tomada en marzo de 2022 por el presidente al avalar el plan de autonomía que propone Marruecos para el territorio provocó un rechazo parlamentario unánime, a izquierda y derecha.

El conflicto se juega también en la UE, donde por ejemplo hay varios acuerdos comerciales con el país vecino judicializados precisamente por no incluir a la población saharaui. Las elecciones europeas del próximo 9 de junio están a la vuelta de la esquina y las fuerzas políticas ya han presentado sus programas electorales. Entre las principales formaciones destaca que tanto PP como Vox han omitido cualquier referencia a la cuestión saharaui en sus documentos.

El partido que lidera Alberto Núñez Feijóo ha pedido de manera incesante que Sánchez revierta la decisión tomada hace dos años respecto al Sáhara. Incluso consiguió sacar adelante hace escasas semanas una Proposición No de Ley (PNL) en el Congreso para instar al Ejecutivo a ello. Pero en su programa electoral, de 22 páginas, no incluye ninguna referencia directa al conflicto saharaui.

Sí que hay un párrafo sobre las relaciones UE-Magreb que podría interpretarse como mención al conflicto saharaui. Pero no aterriza nada en concreto. «Apoyaremos un nuevo impulso de las relaciones Euro-Mediterráneas y la modernización de las relaciones entre la
Unión Europea y el Magreb, basadas en el respeto mutuo y el derecho internacional, para recuperar el enfoque equilibrado que siempre había promovido España en la región y que siempre ha defendido el
Partido Popular», señala.

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