En 2025, los primeros asentamientos de refugiados en Argelia, que acogieron a los saharauis que huyeron del Sáhara Occidental tras la ocupación marroquí que se conoció como la Marcha Verde, cumplirán medio siglo. Observador internacional causas en contra de los derechos humanos de los saharauis, profesor de Derecho Internacional de la UPV/EHU, miembro del equipo asesor jurídico del Frente Polisario, Juan Soroeta ha organizado para este viernes en Itsas Etxea de Hondarribia y para este sábado en el Principal de Donostia dos conciertos para que se siga hablando del Sáhara Occidental y de la ocupación de Marruecos. Soroeta, además, es un gran melómano y es impulsor del Club 44, una asociación sin ánimo de lucro que organiza conciertos en Donostia. Bajo el auspicio del Club 44 se han publicado tres cajas con canciones cedidas por artistas internacionales para esta causa. Amparanoia, Amaral, Izaro, Anari, Rozalén, Vetusta Morla o La MODA son algunos de los que han colaborado en el tercer volumen que la semana pasada se presentó en Bilbao y ahora lo hará en la doble cita guipuzcoana. A las tablas de Hondarribia se subirán Aurora Beltrán, Carmen París, Connie Corlene, Lucía Socan y los Travellin’ Brothers. Al día siguiente, en Donostia, se sumarán a estos Mikel Azpiroz y Maite Larburu.

Su tesis doctoral versó sobre el Sáhara Occidental. ¿Cuándo comenzó a interesarse por esta cuestión?

Cuando entré a la universidad, en 1988, comencé a seguir la pista de lo que ocurría en el Sáhara Occidental. Yo quería hacer la tesis sobre Palestina, pero mi director me dijo que ya había muchos trabajos sobre el tema. Me propuso el de la ocupación del Sáhara Occidental y me aseguró que me iba a enganchar. Así fue.

Ha acabado asesorando al Frente Polisario

Hice varios viajes a los campamentos y terminé mi tesis. A partir de ahí me fui introduciendo en el análisis del derecho internacional en relación con el conflicto del Sáhara Occidental. Fui conociendo a los dirigentes del Frente Polisario y cada vez que había un tema importante que se trataba, por ejemplo, en las Naciones Unidas, me pedían informes como, por ejemplo, el espacio marítimo del Sáhara Occidental o, más en general, sobre el derecho de autodeterminación

En el 2000 Marruecos dijo que jamás habría referéndum.

Hay que situarse en 1975. Era plena Guerra Fría y el Estado español se encontraba organizando un referéndum para el Sáhara Occidental, pero Marruecos recurrió a Francia y EEUU bajo el pretexto de que aquello suponía una amenaza. Les advirtió que si se convertía en un Estado independiente, sería aliado de Argelia y, por lo tanto, se alinearía con el bloque comunista.

Marruecos consiguió su objetivo.

Francia y EEUU, en la Asamblea General de las Naciones Unidas, que hasta entonces había impulsado la descolonización del Sáhara sin ningún tipo de limitaciones, consiguieron que la Asamblea aprobara una resolución que tenía tres partes. La primera, pedía al Estado español que suspendiera provisionalmente la celebración del referéndum hasta que la Corte Internacional de Justicia emitirá un dictamen. En la segunda parte, pedía el dictamen a la Corte en la que aclarase qué derecho era el aplicable. Hasta ese momento, los procesos de autodeterminación se habían resuelto vía referéndums de autodeterminación. A la Corte se le preguntó si este era el caso o si se debía repartir el territorio entre Marruecos y Mauritania, que son quienes pretendían tener derechos sobre el territorio antes de la llegada del Estado español. La tercera parte decidió enviar a El Aaiún una Comisión de Naciones Unidas para comprobar in situ cuáles eran los deseos de la población.

¿Qué resolvió la Corte sobre la segunda parte?

El dictamen fue muy contundente, no existía ningún tipo de vínculo de soberanía ni de Marruecos ni de Mauritania sobre el pueblo saharaui.

¿Y la comisión que visitó El Aaiún qué opinó?

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