FLASH | Les services de renseignement marocains expulsent deux #journalistes italiens 🇮🇹après leur arrivée à #Laâyoune, capitale du #Sahara_occidental occupé.🇪🇭 pic.twitter.com/moq7Qt9bex
— بوابة الجزائر – Algeria Gate (@algatedz) April 27, 2025
Matteo Garavoglia, de 34 años, colaborador independiente de periódicos como Il Manifesto, Domani e Irpi Media, y el fotógrafo Giovanni Colmoni fueron detenidos el domingo 27 de abril cerca de Agadir. Según los medios de comunicación marroquíes en línea, la detención se produjo cuando ambos viajaban en un coche particular con la intención de dirigirse a El Aaiún. La acusación formal presentada por las autoridades de Rabat es de «tentativa de entrada ilegal» en la ciudad, un motivo que, como denuncian a menudo organizaciones de derechos humanos y observadores internacionales, se utiliza sistemáticamente para obstaculizar el acceso de periodistas y observadores al Sáhara Occidental ocupado.
Las acusaciones del gobierno marroquí no se limitan al supuesto intento de evadir los controles. Las autoridades afirman que los dos profesionales de los medios actuaron con la intención de «explotar su condición de periodistas para servir a los intereses del Frente Polisario», el movimiento que lucha desde hace décadas por la autodeterminación del pueblo saharaui.
Fuentes no oficiales indican que este no sería el primer intento de Colmoni y Garavoglia de acceder a El Aaiún, ya que los intentos anteriores habían fracasado a través del aeropuerto Hassan I. Por el momento, los dos periodistas italianos no han hecho declaraciones oficiales sobre lo ocurrido.
La expulsión de Garavoglia y Colmoni plantea serias dudas sobre el respeto a la libertad de prensa en un contexto geopolítico extremadamente delicado. Si bien el derecho a informar y ser informado es un pilar fundamental de las sociedades democráticas, en regiones en disputa como el Sáhara Occidental el trabajo de los periodistas a menudo es percibido por las autoridades como una amenaza potencial a su narrativa y al control del territorio. Este episodio destaca una vez más los desafíos que enfrentan los periodistas independientes al intentar documentar la realidad de una región en el centro de un conflicto internacional de larga data.