El conflicto del Sahara Occidental, reflejo de las contradicciones y carencias del Derecho Internacional / Juan Soroeta Liceras / PDF descarga gratuita / https://bit.ly/3dz5r2A /
Hace tiempo que el Sahara Occidental fue ocupado militarmente por Marruecos en evidente violación del Derecho Internacional, como las Naciones Unidas denunciaron. Si bien los intereses estratégicos de algunas potencias están del lado del país ocupante, el Derecho Internacional está del lado saharaui.
Este libro analiza el proceso que apartó al pueblo saharaui de la senda seguida por la mayoría de los pueblos sometidos a la colonización europea, la autodeterminación, mirando no sólo hacia el pasado, sino también a los problemas actuales y al futuro desenlace del conflicto / #Sahara #SaharaOccidental
Ha transcurrido ya más de un cuarto de siglo desde que el territorio de la antigua colonia española del Sahara Occidental fuera ocupado militarmente por Marruecos, con el beneplácito español, en evidente violación del Derecho Internacional. Los órganos principales de las Naciones Unidas han coincidido desde entonces en denunciar con rotundidad el crimen internacional cometido por este estado, que condenó al pueblo saharaui a la separación física entre quienes hubieron de permanecer bajo la ocupación extranjera, y quienes tuvieron que establecerse en los campamentos de refugiados sitos aún en el lugar más inhóspito del desierto argelino. Si, ciertamente, los intereses estratégicos de algunas potencias mundiales pueden estar en la actualidad del lado de la potencia ocupante, el Derecho Internacional ha estado y sigue estando siempre del lado saharaui.
Partiendo del momento histórico en que la dictadura franquista daba sus últimos coletazos, y España se disponía a organizar un referendum de autodeterminación (noviembre de 1975) que, sin duda, habría culminado con la independencia del territorio, el autor analiza con la rigurosidad propia de un jurista los entresijos de un proceso que apartó al pueblo saharaui de la senda seguida por la inmensa mayoría de los pueblos sometidos a la colonización europea –la autodeterminación–, y lo hace mirando no sólo hacia el pasado, sino también a los problemas actuales y al futuro desenlace del conflicto, con la esperanza de que este pueblo, cruelmente perseguido y hostigado, recupere lo que le fue impunemente arrebatado: su territorio, y su derecho a vivir en él en paz y seguridad.