Rusia habla en la ONU de una peligrosa escalada militar en el Sáhara Occidental

 

 

En la conferencia de formación técnica abierta para miembros del Consejo de Seguridad de la ONU titulada «Cooperación entre las Naciones Unidas y las organizaciones regionales y subregionales (la Liga de los Estados Árabes)», que se celebró ayer, participaron en ella el Secretario General de la Liga de los Estados Árabes Ahmed Aboul Gheit, la Subsecretaria General de la ONU Rosemary DiCarlo y la Ministra de Estado de Asuntos de los EAU Relaciones Exteriores, Anwar Gargash.

 

Vasily Nebenzia, embajador permanente de Rusia ante las Naciones Unidas, dijo que su país apoya constantemente el fortalecimiento de la cooperación entre las Naciones Unidas y la Liga de los Estados Árabes, las dos organizaciones de la misma edad, ambas establecidas para mantener la paz y la seguridad a nivel mundial y regional.

 

«Creemos que este canal debe usarse de la manera más efectiva», agregó.

 

Y continuó: «Lamentablemente, la situación en Oriente Medio y el Norte de África que sigue siendo complicada, entre otras cosas, debido a la falta de organización de crisis graves que a menudo son provocadas por intervenciones extranjeras, como los conflictos en Siria, Libia y Yemen, en su etapa aguda, y ahora estamos ante una escalada en el Sáhara Occidental, y es necesario realizar esfuerzos para mejorar la estabilidad en Irak», reafirmó.

 

Además, agregó, se necesitan medidas urgentes para solucionar el problema central en la región del impasse: el problema de los asentamientos palestino-israelíes.

 

«Esperamos que la reciente normalización entre algunos países árabes e Israel no conduzca a más violaciones de los derechos palestinos y contribuya a un acuerdo justo entre palestinos e israelíes sobre una base reconocida internacionalmente», recalcó el embajador de Rusia en la ONU.

 

«Todos estos «puntos débiles» fomentan un aumento de los sentimientos radicales y las manifestaciones de extremismo. El desarrollo de medidas colectivas para hacer frente a la amenaza terrorista se ha convertido en una tarea cada vez más urgente y requiere una cooperación intensificada entre las Naciones Unidas y la Liga de los Estados Árabes en cuestiones como la respuesta a los desafíos emergentes, el mantenimiento de la paz y los esfuerzos conjuntos destinados a prevenir la escalada en la región la región y contribuiría a la solución pacífica de los problemas y controversias existentes sin injerencias externas, preservando al mismo tiempo los intereses de todas las partes interesadas y sobre la base del derecho internacional», concluyó.