Después de conocerse el ‘Qatargate’, las informaciones turbias que se relacionan con miembros del Parlamento Europeo alcanzan también a Marruecos y a su permanencia ilegal en los territorios del Sáhara Occidental
La Confederación Estatal de Asociaciones Solidarias con el Sáhara (CEAS Sáhara), en la que se integra Cantabria por el Sáhara, ha hecho un llamamiento para volver a poner el foco, en el ámbito europeo, la situación que se vive en el Sáhara Occidental y en los campamentos de refugiados.
Recientemente, personas vinculadas con el Parlamento Europeo se han visto salpicadas por un caso que ha venido a llamarse ‘Qatargate’. Un país situado en pleno Golfo Pérsico y que tiene la posibilidad de vender materias primas de las que hoy son muy valiosas y también bastante caras, ha querido extender sus tentáculos y lo ha conseguido. Por un lado, por la promoción internacional gigantesca que ha tenido por organizar un evento tan global y mediático como el Mundial de fútbol. Por otro, por acuerdos que ha alcanzado con distintas instituciones del panorama europeo, algunos bien visibles y anunciados, pero otro soterrados.
CEAS Sáhara se refiere precisamente a esos casos de corrupción por parte de algunos de los miembros del Parlamento Europeo y, lo que inicialmente fue etiquetado como “QatarGate”, ha acabado extendiéndose en los mismos términos, «aunque desafortunadamente con consecuencias distintas a Marruecos».
Desde la Coordinadora dicen que es sobradamente conocido desde hace décadas en los ambientes diplomáticos, el uso que Marruecos ha realizado tanto de personas como instituciones, organizaciones y empresas para condicionar posicionamientos políticos a favor del reconocimiento de su ilegal ocupación del territorio del Sáhara Occidental. A favor, según su terminología “ de la defensa de la integridad territorial del Reino”.
Para ello, y especialmente desde hace más de una década en lo que respecta a la Unión Europea, han sido numerosas las campañas de lobby, conferencias y actividades llevadas a cabo en las dependencias europeas en defensa de la vulneración del Derecho Internacional.
Numerosos lobistas, personas y entidades participaron en la campaña de “blanqueamiento” de la ilegal ocupación del Sáhara Occidental por parte de Marruecos ante las instituciones europeas. Mientras, las mismas, no solo no actuaban en aras de restaurar la legalidad, sino que presuntamente como se ha hecho público de manera reciente, participaban -a través de personas implicadas- en la consolidación de la ocupación a cambio de ingentes cantidades de dinero.
Ante estos hechos, consideran que las personas demócratas, las defensoras del Derecho Internacional, las defensoras de los derechos humanos, «no podemos permanecer impasibles».
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