143 niños y niñas saharauis disfrutarán un verano diferente gracias al proyecto `Vacaciones en Paz´
«Siempre en la lucha», como él mismo dice al comienzo de esta entrevista. Lleva 18 años perteneciendo a Acansa. Desde 2007, año en que entró como colaborador, ha ostentado cargos como presidente, directivo, y ahora ocupa la vicepresidencia de la Asociación Cordobesa de Ayuda a Niños y Niñas Saharauis (Acansa); una ONG cuyo trabajo se desarrolla durante todo el año para que los chiquillos y chiquillas que malviven en los campamentos del Tindouf como pueblo desplazado puedan vivir unas Vacaciones en Paz, que es como se llama el programa que lleva en marcha desde hace más de 30 años y que permite que cerca de 150 de estos niños puedan vivir un verano diferente con familias de acogida repartidas por toda la provincia de Córdoba. Hablamos con Tomás Pedregal sobre esta iniciativa.
¿Cómo es la campaña Vacaciones en Paz 2025?
La campaña, en realidad, dura todo el año. Desde que se van los niños empezamos la siguiente buscando familias. Además, es nuestro buque insignia, el proyecto que con más ilusión realizamos. Y tratándose de niños y niñas siempre hay un mayor componente sentimental. Este año han venido 143 niños y niñas. Hay pequeñas variaciones de un año para otro. Teníamos más familias, pero al final, por circunstancias personales de algunos niños y niñas, éstos no han podido venir. Las previsiones eran de traer 155-156. No obstante, nos damos por satisfechos con ese número.
En los campamentos tienen su propio programa, auspiciado por el Ministerio de Juventud en las escuelas. Ellos van viendo y deciden los rangos de edad de los niños y niñas, según sus fechas de nacimiento. Y en Córdoba, nosotros trabajamos con el «boca a boca». En numerosos pueblos de la provincia, donde hay muchos niños repartidos, tenemos una serie de colaboradores y vamos buscando familias nuevas. Así es como funcionamos.
¿Cómo es el proceso que se sigue tras su llegada? ¿Cuál es la bienvenida dispensada?
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