Por Lehbib Abdelhay/ECS
Bruselas (ECS).- La comunidad internacional está a la espera de la decisión del Tribunal de Justicia de la Unión Europea el 29 de septiembre sobre los dos acuerdos celebrados entre la Unión Europea y Marruecos relacionados con la agricultura y la pesca, mientras el Frente Polisario busca persuadir al Poder Judicial europeo para que gane esta batalla.
Al respecto, el abogado del Frente Polisario Gilles Devers afirma en una entrevista con Echourouk Online que “esta fecha es muy importante” ya que dará respuesta a varias preguntas, especialmente las relacionadas con la prevención de “todas las actividades económicas en el territorio del Sáhara Occidental excepto con el consentimiento de los saharauis, legalmente representados por el Frente Polisario.”
Respecto a la decisión, que se espera para fin de mes, Devers se muestra muy optimista, “Tengo mucha confianza en la independencia de los jueces y en la aplicación de la ley. Como abogado, mi papel es defender los intereses de la gente, pero son los jueces los que dictan sentencias, sin embargo, tenemos algo en lo que ser optimistas. Primero, nadie puede construir su propio futuro sin respeto por el derecho internacional, y lo que diga la Corte necesariamente se convertirá en un estándar. En segundo lugar, los líderes europeos han puesto a Marruecos en una trampa con la idea de la «extensión», tanto que sabemos que, tarde o temprano, Marruecos tendrá que retirarse del Sáhara Occidental. Cuanto más rápido, mejor.»
Al enfatizar que las disposiciones serán vinculantes para todas las capitales europeas y todas las empresas europeas, el portavoz dice que: “Recibí instrucciones del Polisario con mucha firmeza, y pueden contar con mi determinación de implementar la ley, ya sea que se trate de exportaciones agrícolas, productos pesqueros o aerolíneas, bancos y compañías de seguros: todas los que fueron cómplices del colonialismo, pagarán un alto precio.”
El abogado del Frente Polisario cree que las decisiones esperadas serán mejores que las sentencias emitidas por el Tribunal en 2016. “Estamos a la espera de las sentencias para leerlas, pero creo que registraremos, al menos, algunos avances respecto a la sentencia de 2016 ”, dijo el abogado añadiendo que, “a petición del Frente Polisario estamos trabajando para emprender acciones contra la Unión Europea por el daño causado al pueblo saharaui en los últimos años.”
A través de su afirmación “Marruecos cayendo en la trampa europea”, Gilles Devers aclaró que los acuerdos firmados por la Unión Europea incluyen un artículo que especifica su alcance y fronteras geográficas, y el tratado se aplica únicamente al territorio marroquí, por lo que el “proceso de extensión” en territorios saharauis es rechazado por el Frente Polisario y lo considera una violación de la soberanía saharaui. Todos conocen la falla básica: la Unión Europea concluyó un acuerdo con Marruecos, y este último extendió el acuerdo al territorio del Sáhara Occidental, afirmando que su supuesta soberanía sobre el mismo.
Dado que el tratado se concluye con la Unión Europea, podemos, en este caso, actuar ante el poder judicial europeo. Es una cuestión sobre la que el Tribunal Europeo debería pronunciarse debido al alcance del acuerdo entre la Unión Europea y Marruecos, y así determinar cuál es el territorio de Marruecos.
El jurista explica que “en el derecho europeo, se derivan las consecuencias del estatus internacional del Sáhara Occidental por lo que la sentencia se vuelve ejecutoria contra 27 países de la UE, incluidos los principales partidarios del colonialismo, a saber; Francia y España. Nuestro objetivo es lograr una gran victoria para el pueblo saharaui y el Frente Polisario, y también será una gran derrota para Francia y España, dado el mal causado por estos dos países que no pasaron la página del colonialismo.”
Para confirmar la veracidad de sus declaraciones, el abogado del Frente Polisario se refiere a la sentencia de diciembre de 2016 que, según la legislación europea, considera que Marruecos y el Sáhara Occidental son territorios separados y “Marruecos no puede reclamar ninguna soberanía sobre el territorio, porque está ocupado por el poder militar (…) Esta sentencia puso fin a años de saqueo de los recursos naturales del Sáhara Occidental bajo lo que la Comisión denominó “administración de facto”.
En cuanto a la continuación del litigio a pesar de las sentencias dictadas en 2016, el abogado explica que el Frente POLISARIO y el pueblo saharaui fueron sometidos, a instancias de Francia y España, a maniobras del Consejo y de la Comisión Europea, a pesar de las autoridades saharauis y su voluntad de trabajar con sus homólogos europeos para encontrar un entendimiento sobre el terreno. Los líderes europeos dijeron que era posible extender el acuerdo al territorio del Sáhara Occidental de manera explícita, y ya no se trataba del caso de consultar a la población, ignoraron las condiciones expresas de gobernanza y quisieron reemplazar el consentimiento del pueblo ”con“ consultar a la población.”
El Polisario demostrará a Francia y España que, sea cual sea su violencia militar y económica, no pueden romper la unidad de un pueblo unido en torno al derecho a la autodeterminación y que el mensaje del pueblo saharaui es claro: “en el Sáhara Occidental no harás nada sin mí.”
En cuanto al tuit del expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, Devers sentenció que esta afirmación no es más que una declaración política que no existe en el mundo del derecho: “No hay ningún elemento en la ley estadounidense que reconozca la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara Occidental, que aún figura en la lista de territorios no autónomos cuya descolonización es necesaria. Esta maniobra tenía como objetivo aprobar el acuerdo entre Israel y Marruecos frente a la opinión pública marroquí, que estaba molesta, ya que son verdaderos partidarios de la causa palestina. Durante los alegatos programados para los días 3 y 4 de marzo, Marruecos estuvo representado por un competente bufete de abogados , pero «se negaron a hablar sobre el tuit de Trump frente a los jueces, porque haría reír a todos».