A pesar de los signos de deshielo de las relaciones comerciales entre España y Argelia, las empresas españolas todavía tienen dificultades para exportar sus productos. Desde la decisión unilateral de Argelia de suspender su tratado de amistad con España en junio de 2022, las relaciones entre ambos países se mantienen en su punto más bajo. Aunque se han observado algunos signos de recuperación, el boicot económico establecido en junio de 2022 aún no se ha levantado por completo.

La crisis diplomática entre Argelia y España, tras el apoyo de Madrid al plan marroquí de autonomía para el Sáhara Occidental, ha provocado una congelación casi total del comercio desde junio de 2022. Graves consecuencias para España El 9 de junio de 2022, Argelia suspendió unilateralmente el tratado de amistad, buena vecindad y cooperación firmado con España en 2002.

Esta decisión estuvo acompañada de la congelación de las operaciones bancarias entre empresas argelinas y españolas, impuesta por la Asociación Argelina de Bancos e Instituciones Financieras. (ABEF). Desde entonces, las consecuencias económicas de este divorcio han sido pesadas para la economía del país europeo. Inicialmente, Argelia, el principal proveedor de gas natural de España, redujo sus exportaciones, ejerciendo presión sobre un sector energético ya debilitado por la crisis ucraniana. Por su parte, España vio caer drásticamente sus exportaciones a Argelia, afectando a muchos sectores industriales.

A pesar de algunas aperturas ocasionales, particularmente en el sector agroalimentario, el boicot sigue en gran medida vigente. El bloqueo persiste a pesar de los signos de deshielo A principios de 2024 se observaron algunos signos de apertura. Argelia ha autorizado temporalmente la importación de productos españoles, especialmente del sector avícola y de carnes rojas.

Estas medidas llegaron pocas semanas después del regreso del embajador de Argelia a Madrid. Sin embargo, estas aperturas se quedan limitadas a unos pocos sectores, mientras continúa el boicot a otras exportaciones españolas. Sin embargo, en sentido contrario, las importaciones españolas desde Argelia experimentaron un notable incremento en 2023, alcanzando más de 6.400 millones de euros, un incremento del 38% respecto a 2020. Esta situación se explica en parte por la dependencia de España del gas argelino, un recurso estratégico. para el país europeo. Argelia sigue siendo el principal proveedor de gas natural de España, una asociación que parece resistir las tensiones políticas