Por Sidi Maatala
Washington (ECS).- El Departamento de Estado de EE.UU. expresó su preocupación por la violencia y represión ejercida contra los civiles saharauis en los territorios ocupados del Sáhara Occidental. El informe anual del Departamento de Estado de EE.UU sobre la situación de los derechos humanos en el mundo denuncia que las fuerzas de ocupación marroquíes sometieron a los manifestantes que piden la independencia del Sáhara Occidental a tratos degradantes durante y después de las manifestaciones y protestas.
El informe del Departamento de Estado de EE.UU., al que ha tenido acceso ECSaharaui, citó información proporcionada por la ONU y organizaciones internacionales de derechos humanos, donde el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos señaló en marzo de 2021 que había recibido informes sobre el uso innecesario y desproporcionado de la fuerza excesiva por parte de las fuerzas marroquíes para dispersar las protestas pacíficas.
Según recoge el informe, Amnistía Internacional denunció en su momento que la policía marroquí arrestó a Mustafa Razzouk, de 15 años, y lo torturó por participar en una manifestación pacífica.
En marzo de 2020, Human Rights Watch publicó un informe sobre la violencia ejercida por las fuerzas de ocupación marroquíes contra activistas en el Sáhara Occidental.
El informe del Departamento de Estado de EE. UU. también arrojó luz sobre la situación de las familias de los presos políticos saharauis, y denunció que estos presos enfrentan duras condiciones de prisión. Por su parte la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos señaló en marzo que había recibido informes de arrestos arbitrarios y detenciones de activistas saharauis.
Por su parte, añade el informe del Departamento de Estado de EE. UU., Amnistía Internacional y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos informaron que la activista saharaui de derechos humanos Sultana Jaya se encuentra bajo arresto domiciliario de facto desde noviembre de 2020. Aunque las autoridades de ocupación marroquíes negaron que Jaya estaba bajo arresto domiciliario. Las fuerzas de seguridad desplegadas en la puerta de su casa monitoreaban sus movimientos e interacciones. Sultana Jaya afirmó que las fuerzas marroquíes allanaron su casa en varias ocasiones y que los efectivos de la policía marroquí le agredieron físicamente a su hermana y a su madre. Amnistía Internacional informó de que Sultana Jaya y su hermana afirmaron que la policía las violó durante el allanamiento.
El informe del Departamento de Estado de EE.UU. citó el informe anual presentado por el Secretario General de las Naciones Unidas bajo el mandato de la Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental (MINURSO) de que las Naciones Unidas están preocupadas por los informes relacionados con las restricciones injustificadas impuestas por Marruecos sobre el derecho a la libertad de expresión y la vigilancia excesiva. El informe agregó que la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos continuó recibiendo denuncias de hostigamiento y detenciones arbitrarias de periodistas, blogueros y defensores de derechos humanos.
Amnistía Internacional denunció por su parte que los activistas de derechos humanos saharauis siguen siendo objeto de intimidación, interrogatorio, detención y vigilancia extrema, que en ocasiones equivalen a acoso.
El informe del Departamento de Estado de EE.UU. confirmó que la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos no pudo realizar ninguna visita al Sáhara Occidental por sexto año consecutivo, e instó a Marruecos a abordar los problemas pendientes de derechos humanos y mejorar la cooperación con la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos.
Finalmente, el informe indicó que la situación de los derechos humanos en el Sáhara Occidental se ha visto afectada negativamente por la pandemia de la COVID-19, especialmente en lo que respecta a los derechos económicos y sociales de la población.