Es importante recordar que, desde el punto de vista del derecho internacional, el Sáhara Occidental es un territorio no autónomo a la espera de un referéndum de autodeterminación. El derecho a la autodeterminación es un derecho fundamental, todas las resoluciones de la ONU reiteran que el estatus final del territorio saharaui sólo puede decidirse a través del derecho a la libre determinación del pueblo saharaui.
La cuestión del Sáhara Occidental y la violencia perpetrada por las fuerzas de seguridad marroquíes contra los militantes saharauis es un paradigma de los modelos violentos y autoritarios del mecanismo represivo del Estado y el gobierno marroquíes.
Con el paso del tiempo, la militante saharaui se ha convertido, quizás a pesar de ella misma, en el símbolo de la lucha de todo un pueblo.
Sultana Khaya es Presidenta de la Liga para la Defensa de los Derechos Humanos y contra el Expolio de los Recursos Naturales en Boujdour, ciudad del norte del Sáhara Occidental.
Primero perdió un ojo al ser agredida por la policía en la Universidad de Marrakech, y luego sufrió varias “agresiones” contra ella y sus familiares, todo por exigir y seguir exigiendo el respeto de los derechos humanos.
Sultana Khaya lleva en arresto domiciliario desde noviembre de 2020, periodo en el que, entre otras cosas, como han denunciado tanto Amnistía Internacional como el Relator Especial de la ONU sobre la situación de los defensores de los derechos humanos, ha sido objeto de reiterados actos de violencia.
Entre este odioso acoso que denuncia Amnistía, hay que incluir también el hecho de que ella, sus hermanas y su madre de más de 80 años fueron violadas por las fuerzas de seguridad marroquíes.
Esto es inaceptable y tan odioso que incluso las inamovibles y desprevenidas Naciones Unidas, a través de Mary Lawlor, la Relatora Especial de la ONU, han amenazado con sanciones internacionales contra la monarquía marroquí.
Ante todo esto, el Partido de la Izquierda Europea considera necesario y prioritario que los gobiernos europeos intervengan de forma contundente e inmediata, para presionar al gobierno y a la monarquía marroquí a nivel institucional e internacional, para que, como también ha pedido el representante de la ONU, cumplan con su obligación de proteger al activista saharaui, porque en materia de derechos humanos es absolutamente inaceptable cualquier tipo de timidez.
El Partido de la Izquierda Europea al reiterar su amistad y cercanía tanto con el pueblo saharaui como con el marroquí, invita a las diferentes autoridades locales a aprobar mociones y órdenes del día de solidaridad con Sultana Khaya y su lucha a favor del pueblo del Sahara Occidental. Es un derecho de Sultana Khaya reclamar su derecho a la libre determinación.
¡APOYAMOS LOS DERECHOS DE SULTANA KHAYA Y DEL PUEBLO SAHARAUI!