Unas 350 personas venidas desde distintos puntos de las provincias de Castellón y Valencia se reunieron este sábado en la plaça del Parc
Vacaciones en paz es una declaración de amor y de dignidad. Para comprender la magnitud del proyecto hay que hablar del tiempo. En el verano de 1979, por primera vez, asociaciones españolas y el Frente Polisario materializaron las primeras acogidas con el propósito de ofrecer a menores entre 6 y 12 años la oportunidad de alejarse de las duras condiciones climáticas del desierto, recibir atención médica básica y tener una visión de pertenencia al mundo.
Han pasado ya 45 años y el aniversario tiene poco de positivo. Así lo visibilizan quienes llevan años implicados con la causa saharaui. Porque Vacaciones en paz también aspiraba a tener un carácter provisional, como su condición de refugiados. El horizonte siempre ha sido el mismo: hasta que puedan volver a su verdadera casa. Llevan casi medio siglo albergando esa esperanza tan difusa y relegada.
Este sábado, en la Vall d’Uixó, unas 350 personas venidas desde distintos puntos de las provincias de Castellón y Valencia se reunieron en la Trobada de Xiquets i Xiquetes Sahrauís. Con este encuentro no solo compartieron un día de juegos, música y amistad, también visibilizaron otra manera de entender la vida, en la que las culturas diferentes no separan, sino que enriquecen; donde la convicción de gente anónima y comprometida quiebra el muro del olvido.
La Vall vivió este sábado una reivindicativa exhibición de humanidad.
Origen: REFUGIADOS EN LA VALL | La realidad saharaui en la Vall: Amor pese al tiempo y el olvido