Sahara Press Service ha tenido acceso a la sentencia que revela un nuevo escándalo de espionaje marroquí contra responsables del Frente POLISARIO en España. El caso involucra a un ciudadano marroquí que ha residido en España durante 22 años y a quien se le ha denegado la nacionalidad española debido a su afiliación a los Servicios Secretos de Marruecos (DGED) y su participación en la recopilación de información sobre actividades relacionadas con el pueblo saharaui.
La sentencia, a la que Sahara Press Service ha tenido acceso, fue emitida el 31 de mayo de 2023 por la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional, Sección Tercera, y aborda un recurso contencioso-administrativo presentado por el «espía marroquí» contra la resolución de la Dirección General de los Registros y el Notariado que denegó su solicitud de obtener la nacionalidad española.
La denegación se basa en la falta de justificación de buena conducta cívica debido a motivos de orden público o interés nacional. Según la documentación del expediente administrativo, se desprende que el recurrente colaboró con los servicios de inteligencia marroquíes desde 2010, manteniendo contacto con su superior y proporcionando información sobre el Frente POLISARIO y la colonia marroquí residente en España.
“El Abogado del Estado solicita que se desestime el recurso, alegando que el solicitante no ha cumplido con el requisito de acreditar buena conducta cívica. La documentación del expediente respalda la evidencia de su colaboración con los servicios de inteligencia marroquíes desde 2010, informando sobre el Frente POLISARIO y la colonia marroquí residente en España”.
Aunque el espía marroquí justifico su “comportamiento adecuado” con la ausencia de antecedentes penales, “la sentencia analiza el concepto jurídico de «buena conducta cívica» y establece que va más allá de la ausencia de antecedentes penales o administrativos, requiriendo una conducta acorde con las normas de convivencia cívica durante un largo período de residencia en España. Además, establece que es responsabilidad del solicitante demostrar de manera positiva su buena conducta cívica.
“La sentencia considera que la denegación está adecuadamente justificada, respetando los deberes de confidencialidad y secreto, al proporcionar una explicación suficiente y fundamentada sin revelar información confidencial por razones de seguridad nacional”.
“En relación con la documentación considerada confidencial, la sentencia del Tribunal Supremo del 17 de marzo de 2021 (recurso 8385/2019) se pronuncia sobre la motivación exigible para justificar una denegación de la nacionalidad española por residencia basada en razones de orden público o interés nacional cuando dicha información se derive de datos o informes considerados confidenciales por razones de seguridad nacional”, añade el documento.
Los servicios secretos de Marruecos se enfrentan a una situación cada vez más problemática, viendo como su plan de trabajo se les está escapando de las manos y se están acumulando escándalos relacionados con el espionaje e injerencia en países europeos. A raíz del reciente escándalo conocido como MOROCCOGATE, que involucra sobornos a altos cargos políticos de instituciones europeas, y las revelaciones impactantes sobre el uso del software israelí PEGASUS para espiar a presidentes y ministros españoles, ahora se están destapando nuevos métodos utilizados por los servicios secretos marroquíes, esta vez centrados en el reclutamiento de «inmigrantes» como agentes secretos.
Estos métodos revelan una preocupante estrategia por parte los servicios secretos marroquíes (DGED), que busca aprovechar la comunidad marroquí en España, conocida por algunos sectores como la “quinta columna”, como herramientas en operaciones de espionaje. La explotación de la situación para obtener información confidencial o influir en la política de países europeos es un hecho alarmante que pone en evidencia las tácticas cuestionables empleadas por los servicios secretos marroquíes.
Estos eventos recientes plantean serias preguntas sobre los límites del espionaje por parte de los servicios de Yassin Mansouri, amigo intimo de Mohamed VI. Además, ya están generando tensiones en las relaciones entre Marruecos y los países europeos afectados, lo que puede tener implicaciones significativas en el ámbito diplomático y político.
A medida que se van revelando más detalles sobre estas prácticas, los países afectados están siendo presionados para que tomen medidas para investigar y tomar acciones legales contra cualquier violación de su soberanía y seguridad nacional por parte de Marruecos.