La Navidad está a la vuelta de la esquina, y con ella la solidaridad, que desbordará Barakaldo durante las próximas semanas con la puesta en marcha del tradicional rastrillo infantil solidario. Una iniciativa que se puso en marcha en 2001 con el fin de dar una segunda oportunidad a juguetes en buen estado a la par que se colabora con una asociación del municipio ayudando a quienes más lo necesitan. Durante los últimos años se ha echado una mano a diversas entidades como La Cuadri del Hospi, Manos Unidas, Cruz Roja o el comedor social de Cáritas, entre otros. Esta vez la recaudación se destinará íntegramente a los niños del pueblo saharaui de Tisla, hermanado con la segunda urbe vizcaína.

Este proyecto implica además a los centros educativos del municipio, que se unen para recoger juguetes usados, limpiarlos, empaquetarlos y ponerlos a la venta con el objetivo de colaborar con una causa solidaria, en este caso con la asociación Sáhara Salam. Medio millar de escolares tomarán parte en esta noble iniciativa, cuyo esfuerzo permitirá dotar de desayunos y nuevo material escolar para los saharauis. «No hay ningún municipio de Bizkaia donde se haga algo igual. Estamos muy orgullosos del alumnado y las AMPA que se implican en dar vida a esta actividad; una actividad sobre todo solidaria, que enseña a los y escolares cómo se puede dar una segunda vida a los juguetes a la vez que se ayuda en causa solidaria, a las personas que más lo necesitan. Nuestro rastrillo infantil solidario es único, es la mejor manera de arrancar con una época tan especial como es la Navidad», ha resaltado este viernes la alcaldesa, Amaia del Campo.

El rastrillo infantil solidario tiene dos vertientes: la solidaria y la educativa, que se está desarrollando de la mano de Sáhara Salam y que llegará a alrededor de 1.860 escolares de 3º y 4º de Primaria. Desde su puesta en marcha en 2001, «en estos años de vida los escolares de Barakaldo han logrado recaudar más de 378.500 euros; una cantidad que consideramos muy importante y creo que los alumnos deberían estar completamente orgullosos», ha expresado la regidora, quien ha recordado que en la última edición de este evento se recaudaron más de 28.503,42 euros que se destinaron a la asociación Alcer Bizkaia, que agrupa a personas con enfermedad renal crónica y sus familiares.