- El socio de Gobierno de Pedro Sánchez denuncia la asignación de intérpretes marroquíes a los saharauis, en contra de la recomendación del Defensor del Pueblo.
- El diputado Enrique Santiago pide que se revisen de inmediato las denegaciones de protección internacional a saharauis.
Alfonso Lafarga.-
El grupo parlamentario de Sumar en el Congreso de los Diputados pregunta al Gobierno de Pedro Sánchez a cuantas personas procedentes del Sáhara Occidental se ha denegado asilo desde 2022, año del radical giro en la política de España sobre su excolonia, cuando apoyó la propuesta de autonomía marroquí sobre un territorio pendiente de descolonización.
La pregunta del socio de Gobierno se ha presentado a raíz de de negar la entrada en España al activista saharaui sordomudo en tratamiento por cáncer Ali Hammou y al matrimonio formado por Mohamed Ali Mohamed Slimani y Rbab al-Tarad Yahi, con su hija Aziza, de año y medio, “que abandonaron el Sáhara Occidental para huir de la represión de las autoridades marroquíes”.
La diputada Tesh Sidi indica en el escrito, presentado el viernes en la Mesa del Congreso, que estas denegaciones “se suman a la controversia por asignar un traductor marroquí de un dialecto distinto al que hablaba otro refugiado saharaui”, lo que considera es “inaceptable”. Concreta que el saharaui Mohamed Bachir, tras serle denegada la protección internacional, ha pedido la nulidad de las actuaciones por imponerle un intérprete marroquí “que habría supuestamente tergiversado su declaración”.
En la pregunta de la organización que impulsó la vicepresidenta segunda de Sánchez, Yolanda Díaz, se concreta que, según la defensa, el interprete asignado en este caso habla darja, dialecto marroquí que el saharaui Bachir no entiende pues no tiene nada que ver con el hassania, que es el que se utiliza en el Sáhara Occidental y Mauritania. Por ello afirma no se han respetado las garantías del procedimiento de solicitud de Asilo y Protección Internacional, pues todo solicitante tiene derecho a ser asistido por un intérprete en un idioma que el mismo entienda y en el que pueda expresarse.
Para Sumar, “supone una violación flagrante a una defensa justa y es un atropello a los argumentos de un solicitante que ha manifestado que la persecución que sufre viene de un estado del que el interprete es nacional”.
Incide en que se ignora la recomendación del Defensor del Pueblo referente a que en casos de conflictos abiertos entre países no parece razonable ni conveniente que en un expediente de asilo se contrate la prestación de servicios de personas que “por su nacionalidad provoquen sensación de incomodidad o enemistad en el solicitante o le induzcan a cuestionar su neutralidad considerando el enfrentamiento de los respectivos países de origen”.
El derecho de asilo y refugio no puede ser ignorado por España para el pueblo saharaui, un pueblo ocupado y perseguido.
🇪🇭 Nuestra responsabilidad con este pueblo hermano exige protegerlo. Estas denegaciones de asilo deben ser revisadas de inmediato.
¡Viva el Sáhara Libre! pic.twitter.com/3wPNMHpyS6
— Enrique Santiago (@EnriqueSantiago) September 14, 2024
Los valores que España debe defender
Tesh Sidi afirma que la negativa a prestar asilo a personas como las citadas “no responde a los valores que España debería defender en la comunidad internacional, ni a los Derechos Humanos de personas en situación de vulnerabilidad y búsqueda de refugio”.
Sumar pregunta al Gobierno cual ha sido la razón para negar estos asilos y qué valoración hace de la situación de un traductor de darja asignado a un hablante de hassania. También quiere conocer cómo valora el tratamiento a las personas saharauis que han pedido asilo desde 2022, cuando se produjo el cambio de opinión sobre el Sáhara Occidental.
En relación con la utilización de los traductores de darja, el diputado del Bloque Nacionalista Galego (BNG), Néstor Rego, pidió el pasado jueves al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en una pregunta por escrito al Gobierno, que cumpla con las recomendaciones del Defensor del Pueblo y deje de asignar intérpretes marroquíes a los saharauis solicitantes de asilo, ya que “la mínima sensibilidad y empatía política y humana debería llevar al Ministerio de Interior a tener en cuenta la situación que vive el pueblo saharaui por parte de Marruecos: décadas de ocupación, de persecución y de vulneración de sus Derechos Humanos”,
Sobre las denegaciones de asilo a saharauis, Enrique Santiago, secretario general del PCE y diputado de Sumar, ha escrito en X (twitter) que deben ser “revisadas de inmediato” y que el derecho de asilo y refugio no puede ser ignorado por España para el pueblo saharaui, ocupado y perseguido, y que “nuestra responsabilidad con este pueblo hermano exige protegerle”.