CHAHID EL HAFED-. Marruecos es un país que sigue cosechando enemigos por sus prácticas, su política imperialista, colonialista y su ocupación ilegal del Sahara Occidental que ha aprovechado durante más de cuatro décadas para explotar de forma irracional y expoliar los recursos naturales de un territorio pendiente de descolonización inscripto al igual que otro 17 territorios no autónomos, en el Comité Especial de Descolonización de las Naciones Unidas.
Tanto Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) como sindicato francés Confédération Paysanne, no han ocultado su rechazo contra las pràcticas de Marruecos y la inacción de las instituciones de la UE para evitar el hundimiento de los precios de sus productos.
La organización profesional agraria ha cargado junto al sindicato francés Confédération Paysanne, el Frente Polisario y la ONGD Mundubat contra el libre albedrío de Marruecos en el Sáhara Occidental y sus repercusiones en el mercado europeo, según informaciones difundidas por el diario digital, EL DEBATE.
Los productores de España y Francia han alcanzado su límite por las importaciones «masivas» de frutas y verduras que llegan procedentes del vecino del sur, añade la fuente.
El Sahara Occidental segùn el diario español, se ha convertido en el huerto de Mohamed VI, ya que ahí se cultivan buena parte de los tomates que luego llegan a Europa como marroquíes y se aprovechan del tratado de libre comercio con la Unión Europea (UE).
El campo español clama contra la política de la UE: «A precio nunca podremos competir con Marruecos y Mercosur»
El Frente POLISARIO, quien en últimos años ha levantado quejas y adoptado una batalla legal contra Marruecos y países cómplices en el saqueo de los recursos saharaui, celebra que finalmente el último fallo fue a favor suyo.
En ese sentido afirma Manuel Devers, abogado del Frente Polisario «Los productos que se cosechan en el Sáhara Occidental no son marroquíes. Marruecos se salta la ley y la Comisión Europea no hace nada».
Sobre los aranceles y productos, señalan expertos y juristas españoles, que la sentencia destaca que los productos agrícolas o comerciales deben ser etiquetados como procedentes del Sahara Occidental y no como productos de origen marroquí.
Por otra parte, añaden “la sentencia hace separación y distinción entre población del Sahara Occidental y pueblo saharaui”.
Los europeos condenan que se favorezcan las importaciones de frutas y verduras de Marruecos que califican de competencia desleal porque los estándares del país africano «están muy lejos» de los que se exige en la UE. La cuestión fitosanitaria, las condiciones laborales de los trabajadores y la sostenibilidad de los métodos copan las quejas de los agrarios europeos, dice el diario.
En ese contexto tanto la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) como sindicato francés Confédération Paysanne reclaman que se cumpla la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) que tumba los acuerdos de agricultura y pesca firmados en 2019.
El agricultor miembro de Confédération Paysanne, Jean Thévenot, subraya el rechazo de su sindicato a todos los acuerdos comerciales con terceros países: «Defendemos la soberanía alimentaria para que cada pueblo maneje su alimentación respetando los derechos. En Marruecos se trabaja sobre un terreno ocupado y con condiciones impensables en Europa, lo que permite producir en precios muy bajos».
La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) se suma al rechazo a los acuerdos comerciales con terceros países; «nunca van a beneficiar a los pequeños productores del país ni al consumidor ni al destino».
El Frente POLISARIO y el pueblo saharaui ganan el fallo del TJUE que declara la nulidad de los Acuerdos Unión Europea-Marruecos sobre Asociación Comercial y de Pesca en sus sentencias de fecha 4 de octubre de 2024.