La diplomacia marroquí vive una caída en picado »en apoyos». Tras el cabildeo y presión coercitiva desplegada, no obtuvo ningún resultado y empeoró su posición considerablemente.
Marruecos se »atrinchera» solo defendiendo la declaración de Trump. Ni siquiera EE.UU se ha puesto de su lado.
ECS. Madrid. | Marruecos comienza a pagar su ira descontrolada tras intentar imponer el reconocimiento otorgado por Trump a la comunidad internacional. El régimen marroquí se ha quedado solo »atrincherado» defendiendo el tuit-declaración de Trump, ya que ni siquiera el país que se lo otorgó apoya la decisión tomada en los últimos días de la era Trump y que solo ha servido para aislar a Marruecos.
En el último mes han sido varios los batacazos que ha sufrido el régimen marroquí, desde la falsa acusación de Brahim Ghali hasta la condena por usar la inmigración como arma política para presionar a España. A ello le han precedido el aislamiento en la Unión Africana que aprobó históricas resoluciones apoyando a la RASD, la firmeza de España y Alemania en no aceptar la declaración ilegal de soberanía sobre los territorios saharauis y ahora le sigue la posición contundente del Parlamento Europeo, la Casa Blanca alejándose de la aventura de Trump y Rusia recordándole que la única solución posible es aquella que dicta la ONU, es decir: la libre determinación del pueblo saharaui.
Todo comenzó ayer en vísperas de la denuncia que iba a aprobar la Eurocámara, horas antes, el portavoz de la Casa Blanca, Ned Price, declaró que «existen unas diferencias muy importantes y profundas» hacia la región del Magreb respecto a las políticas de la Administración actual en comparación con las del expresidente, Donald Trump, en lo que incluye, de forma general, el Sáhara Occidental.
«En términos más generales, hay muy poca continuidad, creo que es seguro decirlo, en lo que respecta a nuestro enfoque de la región», ha aclarado, especificando que, «no hay nada que anunciar sobre este asunto» de forma concreta.
La diplomacia marroquí vive una caída en picado »en apoyos». Tras el cabildeo y presión coercitiva desplegada, no obtuvo ningún resultado y empeoró su posición considerablemente.
Posteriormente, el Parlamento Europeo aprobó por unanimidad (397 votos a favor) una resolución que condena a Marruecos por el uso de menores en la reciente crisis migratoria de Ceuta, denunciando “el uso de los controles fronterizos, la migración y los menores no acompañados” como “presión política” contra un estado miembro, en este caso España. Mostrando su respaldo al país ibérico y reafirmando que su posición sobre el Sáhara Occidental no va a cambiar, en respuesta a las declaraciones del canciller Bourita de »España debe aclarar su posición sobre el Sáhara Occidental» y anteriormente, »la UE debe salir de su zona de confort.»
En la misma tarde, el Ministerio de Exteriores de Rusia confió en que España y Marruecos, con «buena voluntad», puedan resolver por medios diplomáticos la crisis política abierta entre ambos en las últimas semanas, si bien ha advertido de que cualquier cambio en el reconocimiento sobre el Sáhara Occidental debe llegar de la mano de la ONU, informó Europa Press.
La portavoz de la diplomacia de Moscú, Maria Zajarova, criticó ante los medios la decisión de la anterior administración estadounidense de reconocer la soberanía marroquí sobre el Sáhara Occidental, entendiendo que «perjudica el marco legal internacional«.
Las autoridades rusas han insistido en la defensa de un referéndum auspiciado por Naciones Unidas en la aplicación de las resoluciones de la organización internacional, lo que pasa también por negociaciones entre Rabat y el Polisario. Espera, asimismo, una solución que respete la «seguridad regional».
Hay que destacar que el 91,5% del total de los ingresos de pesca del Reino de Marruecos provienen de los caladeros del Sáhara Occidental, caladeros que la misma UE y TJUE consideran saharauis, de ahí la preocupación marroquí y su vandalismo diplomático de estas últimas semanas.