Por Lehbib Abdelhay
Madrid (ECS). – El Director General de Seguridad Nacional y Vigilancia Territorial de Marruecos (DGST), Abdellatif Hammouchi, realizó una visita no anunciada a España los días 16 y 17 de junio. Esta visita, ocultada por el gobierno de Pedro Sánchez, ha servido para hablar del espionaje con el software espía Pegasus. El presidente del Gobierno español ha sido una de las víctimas de las interceptaciones de gobiernos con el software de la firma israelí NSO Group.
Hammouchi se entrevistó con Esperanza Casteleiro, la nueva directora del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), según ha revelado este martes El Confidencial. «Vino a limar asperezas», añadió el rotativo español que citó fuentes conocedoras de la reunión. «Las autoridades marroquíes se han avenido a dar explicaciones a España sobre el uso que hicieron del programa malicioso Pegasus», agrega.
El «súper agente» marroquí ha dado explicaciones en Madrid. Según la misma fuente, probablemente negando ante las autoridades españolas su implicación en el espionaje masivo a miembros del gobierno de España.
El jefe de los servicios secretos y la Policía de Marruecos, de 56 años, llegó a Madrid procedente de EE.UU donde se reunió en Washington el 13 y 14 de junio con los responsables de la CIA, William Burns, y del FBI, Christopher Wray. Según una fuente conocedora, los directores de seguridad norteamericanos han pedido a Hammouchi una explicación detallada sobre el uso indebido del software Pegasus para espiar a ciudadanos, periodistas y hasta jefes de Estado y ministros.
Forbidden Stories, un consorcio de 17 grandes medios de comunicación, desveló el 18 de julio de 2021 que unos 10.000 dispositivos móviles a través de todo el mundo habían sido objetivo de los servicios secretos de Mohamed VI, que utilizaron el software de la firma israelí NSO (Pegasus) para espiarlos. Según detalla El Confidencial, la mayoría —unos 6.000— eran argelinos, pero había también unos 1.000 franceses —incluido el del presidente Emmanuel Macron y los de 14 de sus ministros— y cuatro españoles, el del periodista marroquí Ali Lmrabet, los de dos saharauis, los activistas Aminetu Haidar y Brahim Dahane. Otros 200 más fueron blanco de los servicios de inteligencia marroquíes, según informó el diario ‘The Guardian’ el 3 de mayo, pero aún no se conoce esa lista.
Informes señalaron en marzo de 2019 que el servicio de inteligencia marroquí usó Pegasus para intentar rastrear uno de los teléfonos que Macron usó desde 2017 para comunicarse principalmente con periodistas. Otras 100 personas en Francia, incluido el ex primer ministro Edouard Philippe, funcionarios gubernamentales y periodistas, también fueron víctimas de Pegasus. The Guardian informó que una investigación realizada por 17 medios de comunicación reveló que Pegasus es utilizado en todo el mundo y se utiliza con fines maliciosos.
La investigación del consorcio Forbidden Stories asegura que al menos 10 gobiernos, incluidos los de Bahréin, Kazajistán, México, Marruecos, Azerbaiyán, Ruanda, Arabia Saudita, Hungría, India y Emiratos Árabes Unidos (EAU), son clientes de NSO Group.
El espionaje con Pegasus a los móviles del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez y de sus ministros de Defensa e Interior, Margarita Robles y Fernando Marlaska—así como el intento de espiar el del ministro de Agricultura, Luis Planas— se produjeron en mayo y junio del año pasado, el momento de la crisis diplomática entre España y Marruecos.
Según el rotativo español, el Gobierno de Sánchez no ha señalado a Rabat como la responsable del espionaje —el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, le ha incluso exculpado públicamente—, pero sí sabe que es la potencia que puso en marcha ese espionaje, y no solo por las fechas en que se produjo el ciberataque. Así lo señalan informes reservados del CNI.
Origen: El artífice del espionaje marroquí con Pegasus visitó España y se reunió con la directora del CNI