Ningún miembro del Gobierno de Sánchez acudirá a este foro organizado en el Sáhara Occidental
Agencias
Madrid (ECS). – Marruecos ha organizado para esta semana en la ciudad saharaui ocupada de Dajla (Antigua Villa Cisneros) el primer «Foro Empresarial Marruecos-España». Se trata del primer gran evento económico desde la reconciliación con el régimen de Marruecos.
Dajla es una ciudad costera ubicada en la parte ocupada del Sáhara Occidental. El Gobierno de Pedro Sánchez prefiere ser cauteloso y ningún ministro ni secretario de Estado participará en este foro, según adelantó el diario La Información.
Ningún miembro del ejecutivo de Sánchez acudirá a este foro organizado en el Sáhara Occidental ocupado
Según la misma fuente, ningún miembro del Gobierno de España acudirá a este foro empresarial organizado por la fuerza ocupante de Marruecos en una ciudad saharaui.
Ni el ministro de Exteriores de España, José Manuel Albares, ni la de Industria, Turismo y Comercio, Reyes Maroto, acudirán a la primera cita organizada por Marruecos para consolidar su ocupación militar del Sáhara Occidental.
Después de la firme decisión de Argelia y el malestar entre los empresarios tras el bloqueo del comercio exterior con los argelinos, el Ejecutivo de Sánchez prefiere tener cautela en este momento a la espera de poder reconducir la situación con Argelia.
El foro está organizado por Marruecos en asociación con el gobierno de Sánchez
La ciudad saharaui de Dajla ocupada acogerá, los días 21 y 22 de junio, el Foro Empresarial Marruecos-España, «con el objetivo de consolidar las relaciones económicas, impulsar la economía de la región y dar a conocer a los empresarios españoles su potencial y oportunidades de inversión» en los territorios ocupados del Sáhara Occidental, según dijo un comunicado lanzado por Marruecos la semana pasada.
Según la misma fuente, el Foro Empresarial está supervisado por el llamado «Consejo de la región de Dakhla-Oued Eddahab» (la denominación marroquí de Villa Cisneros – Dajla), en asociación con el Ministerio de Industria y Comercio de España. Este foro, el primero después del giro de Pedro Sánchez en el Sáhara Occidental, y tiene como objetivo abordar los enormes recursos naturales del territorio ocupado en términos de inversión y reunir a empresas y actores institucionales para facilitar la inversión extranjera en la ciudad saharaui”, según un comunicado del Consejo Regional de la ocupación marroquí en la región.
Según Marruecos, este hecho se produce tras la posición del Gobierno español de apoyar el plan de autonomía marroquí, por ser «la base más seria, realista y creíble» para resolver el conflicto del Sáhara Occidental.
El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha reafirmado, el pasado 7 de abril durante su visita a Rabat, al rey Mohamed VI la postura de España de apoyo al plan de autonomía marroquí sobre el Sáhara Occidental.
Sánchez ha enviado el 18 de marzo una carta al rey Mohamed VI en la que asegura que la propuesta de un régimen de autonomía para el Sáhara que Marruecos hizo en 2007 es la propuesta “más seria, realista y creíble” para la resolución del conflicto. La posición la ha anunciada por el ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares, que ha usado esas mismas palabras respecto al plan de autonomía de Marruecos.
El mensaje de apoyo a la propuesta de Marruecos es un giro radical a la posición que hasta el pasado 18 de marzo ha mantenido España de defensa de las resoluciones de la ONU para la celebración de un referéndum de autodeterminación del Sáhara Occidental.
“Hoy iniciamos una nueva etapa de la relación con Marruecos basada en el respeto mutuo, el cumplimiento de los acuerdos, la ausencia de acciones unilaterales y la transparencia y comunicación permanente. Esta nueva etapa se desarrollará, tal y como indican los comunicados del Gobierno de Marruecos, en una hoja de ruta clara y ambiciosa. Todo ello para garantizar la estabilidad, la soberanía, la integridad territorial y la prosperidad de nuestros dos países”, dijo un comunicado de Presidencia del Gobierno de España tras la filtración de la carta por el gabinete real marroquí.