Aziza Mrabih es un ejemplo más de un movimiento que despierta en los campamentos. Herederos de una cultural oral que descubren que en el siglo XXI hay que trenzar ese hilo con el de la resistencia y la lucha, pero también con los de la cultura escrita y la modernidad. Fotos, películas, pintura, música, diseño, arte. Y literatura. Aziza crece en cada texto que envía al Bubisher desde su wilaya de El Aaiun. Como saharauía, como luchadora. Como mujer.
MUJER QUE LUCHA
Mañana va a ser un día especial,
me tengo que preparar,
aquí tengo mis dos melhfas, la negra y la blanca,
mi trenza y bandera también están listas.
Me tengo que preparar emocionalmente,
y es lo más difícil,
no sé si podré sostener mis lágrimas.
El cierre de la brecha de Guerguerat
es una esperanza para todos nosotros.
Es nuestra, tan nuestra como las tierras y mares
que todavía resisten bajo la ocupación.
Hemos dicho que se cierre porque nuestra voluntad
es más grande que nuestras tragedias.
Porque para nosotros
es más bonito el negro verde rojo y blanco que el arco iris.
Porque nos atrae el imán de la revolución
a todos sin excepción.
Porque nos separan tierras y nos une la causa.
Vibrante todo,
banderas por todas partes,
distintas generaciones, música sahraui.
Y sí, todos nos unimos hoy
desde el Aaiun hasta Dajla,
en cita con lo que allí se está haciendo.
En cada lugar donde exista un sahraui
proclamamos todos juntos, con tonos distintos,
nuestro incondicional apoyo
a los que están al otro lado,
llevando la voz de todos
y ganando con sus corazones y oraciones.
Aziza Mrabih
Origen: MUJER QUE LUCHA