Diez niños saharauis pasan el verano refugiados en Lugo del abrasador calor africano. Están aquí desde julio, gracias al programa Vacaciones en Paz, en colaboración con la Asociación Solidaridade Galega co Pobo Saharaui, y volverán al Sáhara en septiembre. El Concello también aporta más de 9.000 euros para hacer posible la estancia de los pequeños, de once años de edad, en España.
Los niños llegan desde Aaiún, Dajla, Ausserd, Smara y Tinduf. Sin embargo, no llegan desde estas ciudades ya que viven en campamentos de refugiados que llevan el nombre de las ciudades del Sáhara Occidental. Algunos de los habitantes de los campos llevan más de 30 años refugiados y, la mayor parte de los niños, son refugiados de tercera generación. La mayor parte de la población vive en tiendas que no tienen agua corriente.
Origen: La Voz de Galicia